“Esto no puede quedar impune”

La presidenta de la comisión de fomento de Jaramillo y Fitz Roy, Ana María Urricelqui, ampliará las denuncias por graves irregularidades en la gestión de su antecesora, la ex comisionada Norma Chumbita, a quien –entre otras cosas- se le observó la incorporación de personal en forma ilegal, irregularidades en la contrataciones de bienes y servicios, y hasta la desaparición de vehículos y mobiliario.

La documentación que Urricelqui presentará en las próximas horas al Tribunal de Cuentas y a la Justicia Ordinaria fueron recopiladas en los últimos meses a partir de la verificación de facturas de pago contrastadas con las obras, mobiliario y parque automotor con el que se encontró la nueva administración, indicó la actual comisionada.

“Algo que no tiene nombre”- Ayer, en el marco de la firma de un Convenio de Responsabilidad Social Empresaria con la Fundación de una empresa de autotransporte, a partir del cual la compañía donó para uso de estudiantes un colectivo para la localidad de Jaramillo/Fitz Roy, Urricelqui indicó a TiempoSur: “El micro que teníamos, que estaba impecable, en la gestión de Chumbita lo negociaron con gitanos a cambio de un Clio y 65 mil pesos; el Clio ha desaparecido de los patrimonios de la comisión de fomento, así como un (camión) Ford F 14.000 y cuantas cosas más”.

La funcionaria indicó, además, que en este tiempo que lleva de gestión encontraron facturas de compra de mobiliario para la residencia oficial de esa comisión de fomento que fue llevado a Pico Truncado, “como tantas otras cosas que fueron robadas y desaparecidas como sillas, mesas, moldes de cordones cunetas que son muy caros y el desastre del parque automotor que es algo que no tiene nombre”, enfatizó. 

Urricelqui mencionó instrumentos legales redactados por Chumbita donde se establece que el colectivo estaba en “excelente condiciones” pero que el mismo no se adaptaba a la exigencia de ir y venir a Río Gallegos para trasladar cajas y “si nunca se utilizó un colectivo para eso, menos lo iba a poder hacer un auto que, además, desapareció de la localidad”. 

Adelantó que el día que echaron a su esposo, Marcelino Pérez, como comisionado de fomento aparecieron inmediatamente una serie de facturas correlativas por montos que iban variando, inclusive de obras que ya estaban hechas e inauguradas, como el campo de doma que contó con la presencia del entonces ministro de Gobierno Daniel Sloper: “Tengo el derecho a pensar y sospechar que esas boletas que fueron llevadas desde Río Gallegos y que están todas firmadas con números correlativos desde septiembre, octubre y noviembre han sido llevadas a la comisión de fomento por este personaje siniestro que mientras iba y nos visitaba, miraba lo que habíamos hecho en la localidad para que después cuando nos echaran, ver qué podía hacer con eso. Cada una de estas cosas las voy a presentar al Tribunal de Cuentas y a la Justicia”, expresó.

Entre otras cosas, observó que hay facturas de comercios de la Provincia de Mendoza y San Juan de donde era el Director de Obras de la función de Chumbita.“Lo que más me duele es el tema de las escuelas porque con nada se puede hacer ese desastre que hicieron con fondos del Estado, pero menos con la salud y la educación”, mencionó, al tiempo que dijo que incluso figuraba un envío de dinero para un vivero en un establecimiento educativo que nunca existió. “Se ven estas facturas con montos importantes que son todos pagos mentiroso”, por lo que “se los voy a acercar a la Justicia para sumar a la causa porque esto no puede quedar impune”.

Finalmente, Urricelqui no le quitó responsabilidad a Osvaldo Maimo, el ex intendente de Pico Truncado, a quien acusó de ser el jefe político de Norma Chumbita. “Estoy muy dolida con él porque sé que cuando nos querían echar como perros fue un gran padrino de todo esto y en varias ocasiones estuvo en el comisionado”, por lo que “Maimo contribuyó a todo el daño y desastre que han sufrido los pueblos de Jaramillo y Fitz Roy con todo su patrimonio”.

RECUADRO DE NOTA

Caso de la familia Leiva: “Estamos ante

un nuevo sistema de viviendas invisibles”

La familia Leiva de la localidad de Fitz Royreclamó que hace más de dos años se les prometió una casa para su hijo Patricio (11 años), que sufre de encefalopatía crónica y escoliosis, que nunca se materializó.

Ayer, consultada al respecto, Urricelqui reconoció la situación y sostuvo que el reclamo le produce mucho respeto y preocupación.

“En la gestión anterior, se habían comprometido a hacer una vivienda con adaptaciones u accesorios, cuando llego me encuentro con facturas que se habla de 190 mil pesos de nivelación de suelo, construcción de viviendas 290 mil pesos, etc. ysolamente estamos con las plateas, por lo que me dio de pensar que estamos ante un nuevo sistema de viviendas invisibles”, dijo.

Más adelante, afirmó que una de esas viviendas era para la familia Leiva y que, como la comisión de fomento no cuenta con los fondos para construirla, mantuvo reuniones con el Presidente del IDUV, por lo que “nos vamos a dedicar a montar esa vivienda y no tengo dudas que, en su momento, el dinero se mandó porque tenemos 900 mil pesos recibidos con pagos que figuran para viviendas construidas en distintas etapas y sólo se ven plateas”.