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La interrupción de clases hace que “los chicos no tengan contacto con el contenido escolar”

La discontinuidad de la enseñanza en la escuela puede ser un factor más que puede generar dificultades en el aprendizaje. Así lo sostienen especialistas afirmando que el contenido escolar “está pensado y trabajado para ser impartido gradualmente”.

  • 19/02/2017 • 13:53

La interrupción de la enseñanza escolar hace que los chicos no tengan contacto con el contenido escolar que está pensado y trabajado para ser impartido gradualmente.

En este sentido, la psicopedagoga Elva Díaz aclaró que durante el desarrollo del ciclo lectivo se espera que el niño adquiera la lecto-escritura, el cálculo y las primeras operaciones matemáticas.

La interrupción de éste “va a incidir en esto y necesariamente va ha haber recortes en el proceso de enseñanza”, va a ser más acotado, ya que “una cantidad de contenidos están pensados para ser trabajados durante un año lectivo y si éste se reduce, no se va a poder cumplimentar esta parte”, aseguró.

En consecuencia, los conocimientos que el alumno va a adquirir se reducirán.

Por otro lado, la especialista consideró que el aprender “no pasa necesariamente por los paros” y la interrupción de las clases.

“Hay chicos que tienen dificultades para aprender y esto no está relacionado con las medidas de huelga. Son muchos los factores que pueden incidir para que un niño no aprenda”, dijo.

Las políticas educativas actuales, en este sentido, pueden llegar a ser un factor  de incidencia en el proceso de aprendizaje de los niños.

La profesional sostuvo que si un niño, por ejemplo, no ha adquirido la lecto-escritura y luego pasa a segundo grado, en el cual se trabajan otros contenidos y se dan por sabidos algunos, le va a resultar más complicado.

“Los contenidos que no han sido adquiridos en un determinado nivel, sea por las razones que sea, en los niveles siguientes el alumno va a tener menos posibilidades de adquirir los que vienen”, señaló.

“Pero no siempre es así, ya que hay niños que van aprendiendo que cuentan con otros apoyos y los procesos no se detienen”, aseguró, afirmando que debido a ello no hay una relación de causa-efecto en la falta de clases y su incidencia en la enseñanza, pero sí puede producir consecuencias.

“En un año se espera que el niño adquiera ciertas habilidades y conocimientos y si el tiempo está restringido, a lo mejor también se van a acotar estos contenidos”, dijo señalando que así se va a tratar de avanzar en lo que se pueda.

No obstante, “esto no depende sólo de la enseñanza, sino también del tiempo personal de los niños”.

Aun así la interrupción de la enseñanza en el aula “puede ser un factor más que puede generar dificultades en el aprendizaje. El proceso que se da en la escuela a través del vínculo pedagógico entre el docente el alumno y el conocimiento que se va a impartir en la escuela se encuentra interrumpido”, afirmó.

El niño aprende todos los días de todo, de las relaciones con los compañeros, en su casa, en el barrio, etc.

Cuando se corta la enseñanza en la escuela “lo que se interrumpe es la adquisición de conocimientos socialmente construidos que se imparten en la escuela”, finalizó.