La declaración de la emergencia climática en Santa Cruz y Chubut

En Santa Cruz, la situación más preocupante se vivió en localidades como Perito Moreno, Los Antiguos y Gobernador Gregores que sufrieron el desabastecimiento de gas producto que los camiones, con los caminos cortados, no pudieron acceder a las ciudades. Estas comunidades vivieron momentos de zozobra al no poder contar con el combustible para calefaccionar las viviendas en momentos en que las bajas temperaturas alcanzaron marcas récords en muchos años.
En esta ocasión el decreto de la gobernadora Alicia Kirchner sostiene que busca la organización, planificación, promoción, control y conducción del Sistema Provincial de Protección Civil. Es decir que declarar el estado de emergencia permitirá dictar medidas de excepción ante eventos adversos cuyas características o magnitud afecten a determinada región o zona provincial.
El instrumento legal habla del fenómeno vivido estos últimos días, de “características extraordinarias” por su intensidad que “ha generado grandes complicaciones sobre la región, detectándose registros de temperaturas de  -10 grados encontrándose muy por debajo de los promedios usuales”. También se hizo alusión a que la caída del interconectado nacional por más de 12 horas que “profundizó el aislamiento y la situación para poder brindar el normal suministro de los tres servicios (agua, luz y cloacas) en toda la provincia”.
Ante esta compleja situación, es esperable la conformación de un Comité integrado por los principales organismos involucrados en el socorro y la atención de las demandas de la población ante esta crisis climática. En este sentido, el decreto establece que corresponde “coordinar los recursos y esfuerzos de todos los organismos públicos provinciales como así también entidades civiles y privadas que directa e indirectamente tengan injerencia en la materia”.
Una declaración de emergencia puede generar la idea de que se está ante hechos excepcionales que dado lo poco habitual de los sucesos las estructuras establecidas para la atención de damnificados se ven superadas. Pero no es un dato menor que esta sea la segunda declaración de emergencia en el año y en un lapso de dos meses. Es importante que las autoridades de los Gobiernos, tanto provinciales como municipales, tomen nota de esta situación que se está planteando en la región y orienten recursos para estas áreas.
La atención de estos acontecimientos requiere una planificación exhaustiva de medidas preventivas y a la vez, de un protocolo integral de intervención ante la emergencia que articule los esfuerzos y roles de cada uno de los actores con capacidad de intervención en estos casos. Si bien siempre es posible que los fenómenos climáticos y naturales superen todo tipo de previsión, siempre es mejor tener la mayor planificación posible que trabajar desde la improvisación y la desarticulación de esfuerzos.