Perros sueltos y razas peligrosas: una problemática que persiste en la ciudad

En los últimos días la superpoblación canina de la ciudad fue foco de discusión por parte de los vecinos de Río Gallegos; quienes –por redes sociales- reclaman la gran cantidad de canes sueltos. El domingo pasado se conoció el caso de los vecinos del Barrio del Carmen que sufrieron la pérdida de sus mascotas por aparente envenenamiento. En tanto, en la localidad de Caleta Olivia un hombre falleció producto de las mordeduras dos perros razas pitbull que le ocasionaron heridas mortales.

El medio se comunicó con el veterinario Dr. Reinoso para conocer qué medidas se pueden establecer para reducir la población canina y qué recaudos deben tomarse a la hora de adquirir razas consideradas “peligrosas”.

Al respecto, el veterinario indicó que cualquier animal de más de 20 kilos, es decir tamaño mediano para arriba, se considera una raza peligrosa. “Obviamente los Pitbull o Rottweiler son razas que pueden generar un daño mayor. El carácter que tienen no está adaptado para cualquier persona; hay que entender que no cualquiera puede tener ese animal porque implica muchas cosas. Desde cuidados hasta entrenamientos que requieren más control que lo que requiere por ahí un mestizo del mismo tamaño”, detalló.

A la hora de tener perros de este tipo de razas, indicó que resulta fundamental el uso del bozal y collar de ahorque.

Por otra parte, con respecto a la superpoblación de canes, indicó que “sería bueno censar a los perros y ver concretamente qué números hay, después desde zoonosis que salgan por la ciudad labrando actas, porque la mayoría de los perros tienen propietario”.

El Dr. Reinoso contó, además, que los últimos casos que atendió en estos días se dieron por envenenamiento y remarcó: “Son perros que tienen dueño, que salen porque los propietarios los sacan para que hagan sus necesidades y quedan afuera, entonces tienen la mala suerte que se topan con ese tóxico”.

Sobre el envenenamiento, indicó que se da porque hay gente que toma medidas extremas; “que lógicamente no es lo que corresponde hacer en estos casos porque encima esos tóxicos son veneno para los perros pero es peligroso para los humanos también. El domingo me trajeron el hueso con el polvo blanco y si es estricnina estamos muy complicados, porque es muy peligroso, está prohibida la venta y el tóxico se puede absorber a través de la piel, por lo que es un peligro para los humanos también”.

Primero y principal, indicó, es que “la gente tiene que entender lo que es tenencia responsable. Falta consciencia y responsabilidad”.

La situación es una constante, remarcó el veterinario; “hubo momentos donde tuve casos más masivos, hace un par de años hubo una oleada de perros muertos por este tóxico” y enfatizó en que “más del 90% de los perros tienen dueño, sobre ellos que no tienen propietario es fundamental que se continúe con la castración masiva”, finalizó.