En la espantosa tarde riogalleguense, lo que el viento nos dejó

Sin necesidad de arrimar el oído con claridad meridiana, a lo lejos se escuchaba al viento con  rabia cantar. De igual modo a los tablones y chapas de la popular crujir sin chistar.

Y entre ellos veintidós voluntades que se esmerarían por su partido ganar.

Renovación y cambio- Que en absoluto guarda parentesco alguno con el viejo lema del radicalismo. Utilizado durante las campañas proselitistas antes de las elecciones propiamente dichas.

Y que si los equipos que se enfrentaron ayer en cancha de Ferro, en mayor o menor medida incurrieron.

En el caso del carbonero- Modelo 2017- marca Carlos Oliva, con su lugar teniente de siempre: Juan Carlos Díaz. Vieja fórmula en la conducción técnica que se remonta de la época de Defensores del Carmen y que se extiende a estos días.

Y que la comisión directiva del carbonero eligió

para reemplazar al saliente Rubén Darío - Juan Carlos Díaz.

El profe Oliva, como se lo conoce en el mundillo del fútbol riogalleguense, es un obsesivo de los entrenamientos y del pizarrón, sin dejar nada librado al azar.

Movimientos y caras nuevas- Como la afectación como tercera punta del ataque para desabordar por afuera la de un tradicional marcador de punta y que incluso en anteriores procesos alternó como volante externo. Claro está nos referimos al polifuncional Lucas Nieto, de escasa incidencia en el juego al cabo del primer tiempo, en que el viento favoreció al carbonero.

 Otra de las variantes que presentaba en su alineación el carbonero era la del segundo marcador central. Un tal Juan Carlos Pino, ungido de las inferiores.

La intención planteada por el cuerpo técnico de darles rodaje a los juveniles de inferiores cumplió con seguridad Odol y no se complicó nunca. Trató de salir jugando y cuando hubo que rifarla no vaciló.

El resto a lo que hace a la constitución del plantel ferrocarrilero, no se registraron mayores novedades. Ausente su arquero titular por expulsión y que todavía no cumplió la cantidad impuesta. Y su relevo inmediato Jonathan González no llegó por una distención.

En su lugar: Agustín Asturi. Sobre los laterales

Luca Forestier -salió lesionado en la complementaria- y Luciano Cárcamo, permanente  salida por su costado, durante gran parte de la primera mitad. Como centrales Leandro Navarro y el juvenil Juan Carlos Pino.

Tres en el medio que responden al esquema preferido por el profe: cuatro-tres-tres.

Con equilibrio y juego a través de Cristian Cárcamo de gran desempeño para recuperar. Sino para hacer la diagonal -especialmente en la segunda mitad para conectarse con los de arriba.

Ejecutor en la mayoría de las oportunidades de las pelotas paradas. Que si bien es cierto no llovieron torrencialmente sobre el área del xeneize, generó situaciones de zozobra. Hacia la ciudadela del uno de Boca que sigue siendo Lautaro Dávila, de dubitativo desempeño bajo los tres palos y que se le puede endilgar algo de responsabilidad. En la tercera anotación del carbonero, al no retener un centro de Lucas Nieto.

Quedándole servida para el diez Carlos Pedersen, que suavemente la empujó al fondo del arco. A espaldas de las calle Fitz Roy y que defendió el uno de la visita.

De la mitad hacia arriba- El desequilibrante Héctor Meana -ex Boca- por derecha y por izquierda el movedizo Carlos Pedersen -autor de dos de las cuatro conquistas de su equipo-.

Y las tres puntas por la cual confió y apostó el entrenador ferrocarrilero Carlos Mayol, que en confuso episodio, el árbitro David Rogel, a instancias de su asistente número dos Sergio González, le indicó el camino al vestuario.

Ergo de ese percance del equipo local, de quedar con uno menos, la visita nunca pudo capitalizar esa superioridad numérica. El triunfo de Ferro nunca se vio comprometido. Es más, a poco del final, llevó la cuenta a cuatro. Tras concretar veloz contraataque, que fue con desborde de izquierda al centro del área, con un Boca muy abierto en defensa y la llegada goleadora de Juan Carlos Taborda para ajusticiar una vez más al indefenso Lautaro Dávila que hizo lo que pudo.

Por el lado de Boca- En cuya alineación no aparecieron caras nuevas y aunque en menor medida -comprándola con la del carbonero- registra un alto porcentaje de juventud en el esquema desplegado en la tarde de ayer.

En donde a excepción de algunos, de larga trayectoria en el club -caso de Rudy Cansino y Leonel Videla- reforzaron al carbonero en la última participación en el Federal “C”.

El resto promedia los veinte años y monedas.

Un aguerrido lateral por derecha Ezequiel Villa, atento y rápido para cerrar, pero “raspa” demasiado. Prueba de ello fuerte cruce a su colega Luciano Cárcamo, cuando le había ganado la posición.

En el otro extremo de la retaguardia, el avezado Leonel Videla, que para infortunio propio y de su equipo, se llevó por delante la pelota servida desde un tiro de esquina y batió su propia valla. Colocando en ventaja a Ferro, que por armonía de juego y determinación ofensiva, había sido un poco más que el xeneise, en el balance general de una etapa inicial en que los dirigidos por Carlos Oliva se retiraban al descanso. Gananciosos uno a cero.

Con funciones repartidas- El medio juego del xeneise con un cinco, como Luis Cabral para ordenar la recuperación y el respaldo que logró con intermitencias del juvenil Gianni Rincón y el habilidoso Juan González, quien durante gran parte del primer tiempo la pidió siempre. Poniéndose al equipo sobre los hombros.

Rudy Cansino para ponerla bajo la suela y tratar de organizar la creación de juego. Empero, en escasas ocasiones interlocutores válidos en un ataque demasiado liviano con Alfredo Martínez -salió lesionado en el segundo- y Jonathan Bastamente. 

Lo que fue… Un primer tiempo en que el local se fue en ventaja por la mínima… con viento a favor.

Se percibía el efecto pernicioso del fenómeno meteorológico, cuando el arquero de Boca sacaba, la intensidad del aire en movimiento lo frenaba de inmediato.

Ferro se insinuó el más punzante en los primeros minutos y avisó con un cabezazo débil de Carlos Pedersen. Remate apenas desviado del habilidoso Héctor Meana.

La visita no podía estrechar filas y recurría al pelotazo como recurso para llegar hacia los dominios del uno ferrocarrilero.

Desborda el siete del local Carlos Mayo y su remate bien conjurado por Lautaro Dávila.

Quien sobre cartón se queda con un cabezazo del once Lucas Nieto.

Respuesta del xeneize a través de un remate de larga distancia que se desvía en un defensor de Ferro y se va cerca del palo derecho de Agustín Asturi.

Con poca fortuna prueba de larga distancia el volante central Cristian Cárcamo.

La apertura en el marcador a favor de Ferro estaba al caer. Jugaba demasiado rápido y se impacientaba porque el gol no llegaba.

Seguía atacando y su juego alcanzaba fluidez, cuando la pelota pasaba por los pies de Cristian Cárcamo, seguía en el jugador que determina el cambio de ritmo en el carbonero: Héctor “Pescadito” Meana.  Ya sea para tocar de primera ir a buscar la devolución o colocar ese pase entre líneas que deja a un compañero suyo solo frente al arquero.

Y pegó el grito nomás- Aunque se ha tratado de un auto gol, la desventura propia del lateral Leonel Videla que empuja la pelota al gol en contra. Ante la mirada atónita del pobre Lautaro Dávila, con grado cero de responsabilidad. En La accidentada secuencia que pone merecidamente en ventaja al local que casi aumenta si el tacazo de lujo, ensayado por el volante Carlos Pedersen, hubiera surtido efecto.

Más simple de lo esperado-. Resultó para la formación ferrocarrilera la definición del encuentro ante Boca.

Con un rasgo paradojal jugó con viento en contra.  Pero a pesar de esa incomodidad acrecentó la diferencia en el marcador.

Ante un adversario que habida cuenta de los cambios introducidos a saber… Nahuel Godoy por el lateral Ezequiel Vila. Emiliano Gallardo por el lesionado número nueve Alfredo Martínez.

Completando el pack de cambios en el auriazul. Saltó a la cancha el juvenil Jair Silva en reemplazo del otro punta: Jonatahn Bustamante - otro de los amonestados-.

Ante este cuadro de reemplazos el xeneize se quedaba sin delanteros naturales, lo que obligó a improvisar de tal a su lateral Leonel Videla. Quien terminó jugando de nueve esperando algún centro salvador.

Por el lado del local, Jhonatan González por el lateral Lucas Forestier lesionado, obligando el retroceso de Lucas Nieto. Recuperando de esa manera su posición de lateral por izquierda.

Se cansó de trepar por su carril y de hecho de sus pies partió en centro que al gol. Con la complicidad del arquero de Boca, Carlos Pedersen, estampaba el tres a cero. Ilevantable para un xeneize que jugaba con el corazón en la mano.

Y llegó el segundo nomás-  En una rápida jugada que incluso sorprendió a los mismos compañeros de una implacable Carlos Pedersen, que sobre los diez de la complementaria, con remate, no muy fuerte, pero esquinado decreta la segunda caída del arco de Lautaro Dávila, para tomar más aire en el trámite y en el marcador.

Sobre cartón, en una situación bastante difusa, a

 instancia del asistente número dos Sergio González. El árbitro principal David Rogel le saca la roja al delantero Carlos Mayol.

Otra baja, pero no el campo de juego, sufre el local, cuando el juez principal ante reclamos reiterados ordena al ayudante de Carlos Oliva, Juan Carlos Díaz, que su tiempo en el campo de su juego llegó a su fin.

No sacó el pie del acelerador. Los dirigidos por Carlos Oliva y siguió yendo para adelante. Por expreso pedido de éste que conserven la dinámica y el juego de primera. Empero de manera ordenada y no desperdiciar nada en procura de seguir convirtiendo. Así fue que en dos ocasiones en los pie de Héctor Meana, estuvo a punto de aumentar. En otra perfecta habilitación para el otro punta: Juan Carlos Taborda, pero lo anticipa el uno xeneise.

En otra buena combinación, el goleador Carlos Pedersen falla en la definición.

Boca, tuvo el descuento en un corajeada de Leonel Videla. Pero su remate dio en la parte exterior del arco.

Y no pararon hasta el cuarto- Haciendo escala en el marcador en el tercero, luego de un rápido desborde de Lucas Nieto y con la complicidad del arquero Carlos Pedersen, anota el tercero.

Había tiempo para cerrar la cuenta, cuando por el mismo sector, con un xeneize desguarnecido en defensa, de izquierda al centro del área y la atropellada fatal de Juan Carlos Taborda, para herir definitivamente de muerte al pobre Boca.

Completaron la actividad del Federado- En Quinta división la igualdad en dos. Entre el albiverde y el celeste.

En Primera, en Teófilo de Loqui y Mitre, cancha de Hispano. El triunfo tres a dos, de Defensores… ante Unión...tres a dos.

Se ponen al día- Entre semana completarán sus respectivas fechas del Federado. El clásico Hispano – Boxing en Primera división. El miércoles desde las 21:00.

En tanto, en el día que comienza la primavera,

el jueves 21, se pondrán al día en Quinta división. A partir de las 16:00 en Teófilo de Loqui y Mitre, Ferro – Boca.