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Hace cuatro años comenzaban a generarse los asentamientos

Las primeras usurpaciones fueron durante la víspera de noche buena, un 24 de diciembre de 2007. Poco a poco el predio situado a metros del Vaciero se convirtió un sector más de la ciudad. Sin servicios esenciales, los vecinos siguen pidiendo pagar los impuestos y la tierra. No creen tener en el futuro una mejor propuesta para dejar sus viviendas.

26/12/2011 • 00:00

En el 2007 se apostaron poco más de 50 familias. Hoy son más de 400. (G.C).

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Hace exactamente cuatro años atrás, en el hoy denominado “Barrio Madres a la Lucha”, comenzó un suceso que hasta ese momento no era para nada común en Río Gallegos: las usurpaciones.

En todos estos años, estas tierras fiscales propiedad de la comuna (existen dos asentamientos más en la ciudad) al parecer seguirán siendo ocupadas por residentes que no se estiman abandonar sus viviendas de material ligero, y que piden pagar sus tierras y servicios como cualquier otro habitante de la ciudad.

“Yo vine después de la fiestas en enero.

Yo veía en la televisión como empezaron a construir las casas el 24 a la noche y navidad y estaban haciendo comidas en una fogata para unos vecinos. Algunos sin techo, eran pocos en ese momento”, contó Norma Díaz, referente del barrio.

Norma no fue una de las primeras ocupantes de los terrenos situados a metros del Vaciero Municipal. De hecho fue recién en enero cuando decidió apostarse en un espacio amplio que de a poco divisaban pequeñas viviendas de madera y chapa e incluso carpas, que delineaban el territorio de cada familia.

“Siempre fui a pedir que me anotaran para una carpeta. Pero me cansé al ver que otras personas que son “conocidos” o “hijos de” le daban terrenos”, dijo. “Esto sigue pasando”, agregó a TiempoSur.

El predio que cuenta con más de 400 familias, y que fue censado por los propios residentes hace tres meses, no cuenta con ningún servicio.

“No abonamos ningún servicio y desde hace cuatro año reclamamos para pagarlos y que nos hicieran las instalaciones y así cada uno se haga responsable del consumo de sus hogares”, destacó.

Desde el invierno del 2008 las familias reciben las garrafas de gas subsidiado que provee la empresa Surgas. Cada una de 5 kilos cuesta 4,50 pesos, y 158 pesos las de 45 kilos.