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El municipio pedirá hoy al juez Arenillas que dicte sentencia

Martín Medvedoff, asesor letrado del Municipio, llevará el expediente al juez Enrique Arenillas. Ayer vencieron los plazos para que los usurpadores respondieran a la Justicia. De las 14 personas notificadas respondieron sólo dos. Ocho de ellos obviaron el proceso legal y los cuatro restantes presentaron un domicilio falso.

  • 01/06/2012 • 00:00
Se cumplen cincuenta días del asentamiento. (H.C)
Se cumplen cincuenta días del asentamiento. (H.C)

El abogado del municipio, Martín Medvedoff presentará hoy ante el juzgado del Dr Enrique Arenillas el pedido para que dicte sentencia sobre la usurpación de los terrenos 17, 18 y 19 en el barrio Néstor Kirchner, ex Los Lolos. A partir de esto, el Juez deberá estudiar el caso a fin de dar una resolución.
Ayer a las diez de la mañana, venció el plazo de los usurpadores para responder  la demanda. De las 14 personas notificadas, solo dos de ellas respondieron mediante abogado, 8 no emitieron ninguna resolución y cuatro personas no fueron notificadas por haber presentado un domicilio falso.
La notificación surgió luego de que el Municipio y la policía realizaran un relevamiento en los asentamientos, a fin de verificar la cantidad de familias y personas que ocuparon los terrenos.

Terrenos
El asentamiento cumple cincuenta días desde que la primera persona se instaló. Medvedoff indicó que sí hubo una respuesta rápida desde lo legal, ya que en primera instancia se hizo el cercado policial para evitar que creciera el número de personas que usurparon el lugar. De todas maneras, con el correr de los días dicho cercado fue haciéndose cada vez más flexible, según admitieron las propias personas que se asentaron en el lugar.
Los materiales de construcción ingresaron de día y de noche y el crecimiento del barrio en las últimas semanas fue casi desmedido.

Plazos legales
Los plazos legales vencieron finalmente ayer. Luego de cincuenta días desde que se originó el problema, hubo una novedad importante. En este sentido, Medvedoff contó a TiempoSur que “corrimos el traslado para 14 personas. Solamente diez fueron notificados, y dos contestaron. Para esas personas, venció el plazo, ya que eligieron no presentar una respuesta. Por esto vamos a pedir que se pase el pedido de sentencia por parte de Arenillas”. El Juez tendrá que decidir, según remarcó el abogado, si el municipio tiene derecho sobre los terrenos por ser los poseedores o tomará en cuenta los argumentos de las personas que ocuparon el predio. El desalojo sigue siendo lo más esperado por el Gobierno local.
“Vamos a pedir que el Juez determine si corresponde dictar sentencia. Arenillas va a recibir el expediente y va a ver si hay pruebas suficientes para la sentencia y que no haya ningún impedimento. Queremos ver si el Juzgado nos hace lugar o no a que se dicte la resolución”, contó Medvedoff.

Cercado policial
Con cincuenta días de crecimiento,  el lugar presenta un notable cambio desde las primeras jornadas cuando se originó. De algunas casillas y carpas, pasó a contar con una importante cantidad de casillas de material ligero. Incluso, algunas personas ingresaron chapas y madera a pesar del círculo policial.
“Tuvimos medidas cautelares y presencia policial.  Lamentablemente pasó que no se cumplieron y en primer momento ya había seis casillas instaladas. No me resulta justo que se responsabilice a la acción judicial”, remarcó el entrevistado.

El ingreso de material
Las casas ya no son solamente de materiales recolectados de los alrededores. Las familias adquirieron madera y chapa de los comercios locales. Tal cantidad de productos fueron pasados, según señalaron las familias, en horas nocturnas, especialmente de madrugada.
TiempoSur observó en varias oportunidades cómo ingresó el material por los lados del asentamiento, haciendo parecer a la custodia policial casi irrelevante.


Son un barrio
Anteriormente, las familias habían indicado que no quería que se las considerase como un asentamiento, sino como un barrio. El paisaje actual que muestra el lugar se asemeja a los anhelos de las familias, y la numeración de las viviendas da el toque final.