Cultura

Daniel Riba Castro expuso sus juguetes del viento en la Feria Internacional de Artesanías

El artista dialogó con TiempoSur y comentó acerca de su participación en dicho evento en el cual compartió espacio con artesanos de diferentes partes del mundo. Lo hizo a través de sus veletas animadas.

  • 18/12/2012 • 00:00

Hace algunos días atrás se llevó a cabo la Feria Internacional de Artesanías en el predio de la Sociedad Rural en la ciudad autónoma de Buenos Aires. En dicho acontecimiento, la provincia de Santa Cruz fue representada por el profesor de Bellas Artes y Maestro en Cerámica, Daniel Riba Castro, quien hace doce años dejó su Río Gallegos natal para afincarse en la ciudad de Pilar en la provincia de Buenos Aires. Con el propósito de conocer algunos detalles de su participación en la feria como así también parte de su trayectoria y afinidad con el arte, TiempoSur entrevistó al artista.  

-¿Cómo se denomina el evento del cual estuvo participando en los primeros días del mes de diciembre? ¿Cuáles son las características del mismo?
-Se trata de la Feria Internacional de Artesanías que realiza todos los años en la ciudad de Buenos Aires. Para poder participar de dicho evento se necesita pasar por un jurado internacional. Se debe ser parte de una pre-selección. En la feria participaron artesanos de diferentes partes del mundo. En mi caso en particular quiero destacar que hace años que participo de la misma. En esta última edición lo hice con obras de cerámica. Mi historia personal y profesional de algún modo siempre está vinculada con el sur.
La posibilidad de ser parte de la feria surgió a través de la Casa de la provincia de Santa Cruz. La idea de ir a exponer o brindar capacitaciones a la capital santacruceña siempre está latente. Cuando llegué a Buenos Aires me dediqué a trabajar de manera independiente, lo cual no es nada fácil. Cuando uno se dedica a la parte privada, la cerámica está un poco desprotegida porque habitualmente se compran piezas y las mismas luego son reproducidas por los chinos quienes venden esas replicas. A raíz de todo esto busqué la forma de realizar piezas únicas que resultaran difícil de reproducir en series. Soy el único que realiza veletas animadas en Argentina. Con ese estilo de obras participé en la feria.

-¿Qué aspectos puede destacar sobre su trayectoria?
-Hoy recuerdo todavía los inicios de la Escuela municipal de cerámica. En aquellos años trabajé junto a Marta Abate, una de las fundadoras de la escuelita. También dicté clases en el Centro Polivalente de Arte. Asimismo fui director de la Escuela de Cerámica de Puerto San Julián.
Por esas cosas del destino, luego me fui a vivir a la ciudad de Pilar en la provincia de Buenos Aires a 60 kilómetros de la capital. Yo tuve la responsabilidad de capacitar a toda la Patagonia argentino-chilena. Es así que además en varias ocasiones viajé a las ciudades de Punta Arenas y Puerto Natales. Cuando me fui a vivir a Puerto San Julián comencé a generar algunos contactos con gente de otros puntos de la provincia de Santa Cruz y Tierra del Fuego. Un recuerdo que viene a mi mente tiene que ver con la labor que desarrollé como profesor de cerámica en la Alcaidía de Río Gallegos. A lo largo de todos estos años he conocido mucha gente con la cual a pesar del tiempo todavía sigo manteniendo contacto. La reconocida profesora Amanda Mora fue quien me trasmitió muchos de sus conocimientos. Con Amanda y Eduardo Minnicelli formamos un trío en virtud de promover el arte.