Chau chau adiós

De cuerpo y alma pinta la buena intención y reconocimiento de parte de los colegas de una radio comunitaria de la ciudad del verdugo de turno del  riogalleguense  Boxing.

Deduciendo el buen trato de balón de tres cuartos de cancha hacia adelante, que por momentos, durante gran parte del segundo tiempo y con  la desventaja final que los marginaría de la competencia,

esgrimieron  las once voluntades de Carlos Padín, que dicho sea de paso se  fue antes el minuto noventa.

Antes, cuando espiraba la etapa inicial, con  ventaja de uno a cero para la visita hacía lo propio por decisión del piedrabuenense Juan Román Koncevich,  el segundomarcador central Mauro de Negri, por protestar una tarjeta amarilla aplicada por el juez central de la porfía.

Con eso no alcanzó-En virtud de  que el huésped dirigido por un conocido del medio, que en otro tiempo de representación bancaria se lo  encuadraba como potencial candidato a la conducción de la escuadra azurra. Sí, el que se imagina… Ignacio “Piti” Murúa, de vasta trayectoria como entrenador de conjuntos de la región patagónica.

Entre ellos, equipos de Puerto Madryn  como uno de los eslabones de una

larga cadena profesional.

Lejos de especular por su inmejorable situación detentada en la tabla de posiciones en la zona.

Desde el inicio  mucho mejor parado que el local, se apropió de las riendas del trámite y condujo  el destino del mismo hacia los tres palos que defendió a espaldas de la avenida San Martín el joven Lucas Contreras, que  empezó a padecer la falta de respuestas defensiva en la que el despliegue de Federico Villar,  recostado sobre la izquierda de la defensa,  no encontró correlato funcional, en la zona central de la  misma,  a través de los centrales Michael Rementería  y Mauro de Negri, que pagaban y en efectivo, cuando el  conductor  el generador de juego y autor del primer tanto de las visita, Brain Garino, le ganaba las espaldas, habilitación de por medio,   allá por los cincos minutos, cuando el partido, no se había armado, metió una magnífica diagonal  para la imperfecta definición por arriba del larguero a cargo del ex Boca, Robinson Torres, que la tiró a la avenida San Martín.

Aviso que le dicen.

Casi sobre cartón, deficiente salida por la izquierda de la defensa,  anticipo de Robinsón Torres quien falla en el intento de ajusticiar al pobre Lucas Contreras, que conjura parcialmente la acción que finalmente derivaría en los pies del diez de Germinal, Brain Guarino, quien en exquisita definición  establece la apertura del marcador, que a esa altura no se podía determinar de merecimientos o no eEn razón de que recién se llevaban disputados siete minutos.

Empero con el correr del mismo la visita,  que llegaba de contra rápidamente a la ciudadela adversaria, comenzó a justificar esa ventaja obtenida.

 La jugada se inició por la derecha del campo de juego, fijando como referencia posicional el sector de las cabinas de transmisión.

Tenencia de balón del diez de la visita,  bochazo en diagonal para la atropellada fallida del delantero Bruno Nasta, levantando el remate final.

En otra veloz contra casi aumenta el verde de Rawson en la que  una de las dos puntas, Brian Sosa,  casi moja.

Y en la secuencia siguiente,   el segundo central Mauro De Negri, acertadamente anticipa al  dinámico cuarto volante con alma de delantero, Robinson Torres.

El despertad albiverde-  Cuando la recuperación del balón sintonizó la misma frecuencia del negrito Maximiliano Díaz -de gran despliegue- junto  a su compañero de fórmula  para el cargo de doble volante central, Jhonatan San Martín.

Más el agregado en la participación del juego del ex Defensores Mauro Fuentealba, recostado sobre derecha y en carrera hace las veces de puntero, llega hasta la raya, y sirve el centro que encuentra una de las pocas situaciones de gol generadas por el local. El anticipo ofensivo de Lucas Martella, que se va por arriba del larguero sin  que le haga cosquilla al uno Denis Robert.

Interesante el retroceso del debutante al menos en este encuentro, Lucas Altamirano, asociándose a la  gestación del juego y reduciendo de esa manera el servicio  de un recurso como el pelotazo, que siempre encontraba bien ubicado a los centrales Gustavo Caamaño y Walter Denco.

Rara vez, incluso con pelota  en su poder, la línea de cuatro del albiverde de Rawson  se alteraba en su composición

Alguna que otra trepada por su carril de Damián Salinas, en uno de ellos el balón se fue cerrando, obligando al manotazo sobre el horizontal de Lucas Contreras.

Casi le rompe el arco-En  el mejor momento de perseverancia  ofensiva acusado por el local, jugado con el adelantamiento incluso a través  del ex Boca Federico Villar, quien alarga la jugada para el desborde de  otro ex Boca, Germán Villarino, y su centro encuentra el fuertísimo envío del nueve Altamirano, que no se mete porque una pierna salvadora de Germinal interrumpió el destino final y feliz, como hubiera sido la igualdad obtenida por el auriazul, quien, no siendo  operación triunfo,  otra variante, no  le servía.

Encima que la adversidad con la que intervino por primera vez en este tipo de certámenes se vería agravada por la expulsión por doble amarilla del segundo central Mauro Negri, por reclamar   ante una infracción cometida,  tarjeta amarilla.

Y encima, lo embocan-Al albiverde de Carlos Padín que a poco de indicarse la etapa complementaria por decisión del árbitro, es expulsado también.

Situación esta, sumada a la anterior,  provoca desde lo anímico  una suerte de efecto bisagra dentro y fuera del campo de juego en razón de que en sólo cuarenta y cinco minutos se debe revertir un resultado, con dos goles al menos, para seguir con vida.

Encima, tras llovido mojado-A la desventaja de jugar con uno menos,  de añadía el baldazo de agua helada provocado por el golazo de Robinson Torres, que en una mortal contra sobre izquierda, ante la salida de Lucas Contreras lo ejecuta con tiro cruzado  sobre el arco a espaldas de Rivadavia, que durante la segunda mitad, defendió el uno riogalleguense

Ilusionados con el descuento-Que en el minuto 17, con un Boxing enojado y tocado en el amor propio, quiere dejar al menos desde la entrega y sacrificio su prestigio bien sentado, si bien es cierto que desde lo futbolístico se encontró con un adversario superior, al menos por lo demostrado en las dos ocasiones es que, como local, el albiverde lo recibió y lo sufrió.

Lucas Altamirano, a esa hora de la tarde, preparó el fusil que a su alcance tenía, apuntó y dio de lleno en el blanco. 

Puntería y gol. Grito desenfrenado y un  racimo humano para abrazar a  quien en lucida maniobra individual, descomprimía tanta ansiedad y desesperanza colectiva.

Todavía al partido le quedaba un trecho largo por recorrer.

Y como en este maravilloso juego todo es posible, igualarlo y ganarlo no parecía para nada descabellado.

Pero los once de Padín la tenían que remar y cómo.

Encima las noticias que llegaban desde Esquel no eran para nada alentadoras. En virtud que a  la maniobra aliancista  con  Belgrano de esa ciudad- favoreciendo  a Boxing-  le hacía la cruz el otro clasificado de San Carlos de Bariloche, goleándolo a domicilio por cuatro a cero.

Había que jugársela-   Por lo tanto entre  el local que desesperado pugnaba por igualar, recurriendo a algunas modificaciones como los  ingreso de Lukacheski por Martella, y  de Emmanuel Echavez, potenciando la ofensiva, además de reforzar la mitad de la cancha con la entrada de Diego Salazar por Germán Villarino.

Y dispuso de  alguna situación en los pies nuevamente de Lucas Altamirano, que encuentra bien ubicado al uno visitante.

Ellos también movieron el tablero- Reemplazando delanteros entre sí.

Afuera el flaco Bruno Nasca, adentro el salteño Mauricio Hoyos en cuyos pies tuvo el tercero  tras lucida gestión asociada.

Otro de los ingresantes, que estuvo cerca de anotar, su goleador curiosamente en el banco. Cristian Taborda en lugar del volante Blas Sosa, más Sebastián Arriagada en cancha, completaban el tándem de relevos decididos por el entrenador Ignacio Murúa.

En ir y venir- Se esfumaron  y se desmoronaron las ilusiones de un equipo que hizo todo lo posible por seguir en carrera ante un Germinal que en términos de resultados lo tuvo alquilado, de local y visitante imponiéndose en las tres ocasiones, por el Federal “B”, dos de visitante y una en su ciudad.

Que incluso con un Boxing apurado y ansioso, por una igualdad que nuca llegaría, el puntero de la zona pudo ampliar la diferencia a través de un remate desviado de su lateral Damián Salinas.

Y una conexión a destiempo de Robinson Torres, luego de  veloz desborde del salteño Mauricio Hoyos en una de las más clara luego de una destacada maniobra individual,  Mauro Fuentealba cede al delantero Lukachesqui, empero su media vuelta queda en una pierna salvadora de la visita.