Política

Denuncian que Vásquez usa los fondos de la minería para dar subsidios millonarios a clubes sin personería

El Concejo Deliberante descubrió la presunta malversación a través de un error contable del municipio. Dicen que, por ejemplo, en los últimos 3 años, un club recibió unos 7 millones de pesos. También habrían establecido un ardid con la obra pública. Además, el concejal Serafini habló de la evolución patrimonial del intendente Vásquez.

  • 03/07/2015 • 00:00
Juan Vásquez, cuestionado por presunta evolución patrimonial
Juan Vásquez, cuestionado por presunta evolución patrimonial

Se trata de la cuenta Boca de Mina, es decir los fondos voluntarios que recibe la Municipalidad de Gobernador Gregores por parte de las operadoras mineras y que representan el 1.26% del valor de boca de mina, cuyo único instrumento legal es un Decreto firmado entre ambos.

 

 La semana pasada, el Deliberante gregorense había detectado, en sesión ordinaria, que en la documentación de los ejecutados remitidos por la administración de Juan Vásquez, figuraba un subsidio proveniente de esa cuenta, destinado a un club que desmentía haber sido beneficiario.

 

Esto generó que desde la comuna salieran a aclarar que en realidad todo se trató de un error porque el club que recibió el subsidio fue otro, pero el caso ya había despertado la curiosidad de los ediles, que concluyeron en solicitar al Tribunal de Cuentas que lleve a cabo una auditoría contable.

Según pudo saber TiempoSur, el Tribunal de Cuentas habría desestimado llevar adelante una nueva auditoría, por cuestiones de programación pero además, el organismo no tendría facultades para indagar sobre el destino de los subsidios, ya que, en realidad, es la comuna la que debería contar con la rendición de esos gastos por parte de los clubes y entidades.

Ayer el concejal Marcelo Serafini denunció en Tiempo FM, que “los intendentes que se vienen repitiendo han establecido mecanismos complejos de detectar en el que utilizan estos fondos mineros para cosas extrañas”, dijo en referencia a la presunta entrega de “subsidios millonarios a clubes que ni siquiera tienen personerías jurídicas, que no han hecho ninguna obra y que nadie sabe realmente dónde fueron a parar esos fondos”

En los últimos días los ediles comenzaron una pesquisa administrativa contable, en la que habrían detectado algunas irregularidades, como “el caso de una comisión de un club que ha recibido siete millones de pesos en los últimos tres años” cuando ese “es el pago de la joya de la abuela por llevarse nuestro oro”, reclamó.

Criticó que los fondos de Boca de Mina “no se invierten en ninguna obra tangible” y lo más curioso sería que “entregan subsidios pero quien cobra los cheques es el mismo que dio el subsidio y luego queda el interrogante sobre qué paso con ese dinero que tuvo que ir a buscar un funcionario municipal al Banco y salió caminando por las veredas con dos millones de pesos”, dijo Serafini.

Según información que este diario obtuvo con fuentes del Tribunal de Cuentas, la comuna gregorense es una de las pocas que, periódicamente envía su balance mensual de Tesorería.

En este caso, sostuvieron que lo lógico sería que los ediles realicen un pedido de informes al Ejecutivo para conocer las rendiciones de los clubes y entidades beneficiadas por la cuenta de Boca de Mina.

 

Evolución patrimonial

 

Por otro lado, el concejal Serafini se detuvo en la presunta evolución patrimonial del intendente Vásquez ya que “vengo pidiendo observaciones y lo voy a llevar a la Justicia” indicó, debido a que el mandatario “es un maestro de escuela que gana 24, 25 mil pesos al mes pero resulta que ha comprado chacras, campos, participa de negocio municipales con una especie de aserradero con el que le proveen al municipio de todos los carteles que andan aquí en la calle”.

Además, “tiene criadero de cerdos y no habilitamos el matadero municipal pero saca la carne en negro por otro lado”, es decir “yo creo que, cuanto menos, habría que observarlo porque llama la atención”, sostuvo.

En este punto, vale mencionar que la evolución patrimonial o enriquecimiento ilícito, no son delitos que estén bajo la observancia del Tribunal de Cuentas, sino que competen a la Justicia ordinaria.

 

Presunto ardid en la obra pública

 

Finalmente, el edil aseveró que en las pesquisas sobre la documentación municipal en lo que refiere a la obra pública, pudieron detectar un presunto ardid pergeñado por las empresas constructoras.

“En las licitaciones hay tipos que se están turnando, los que no se presentan son los que tienen alguna obra o están esperando el turno y siempre se presenta una sola empresa cuyos valores son el doble de lo presupuestado”, marcó sobre un mecanismo “que han instalado, se las conocen todas y es difícil verlo hasta que te sentás y hacés una estadística”, concluyó.