La “Patagonia Infinita”, el arte en hierro, chapa y mucho más

Han pasado casi 3 años desde la primera visita de Walter Di Sipio a Fundacruz, en aquel entonces un hombre recién iniciado en el arte, hoy un artista que revaloriza los rincones patagónicos y los vestigios de estancias ya olvidadas en estas tierras, lo que lo ha llevado no solo a ocupar espacios de arte en su ciudad de El Calafate, sino que también, como en esta ocasión, ha visitado la capital y llevado también su trabajo a Buenos Aires.

Como ya hemos dado a conocer en ediciones anteriores, Di Sipio inicio su relación con el arte en el 2014 en una especie experimentación luego de haber observado algunas obras de arte que llamaron su atención. Ni bien comenzado su camino por ese nuevo mundo del arte creativo descubrió su gran habilidad para trabajar sobre materiales como chapas, hierros, vidrios y alambres, objetos que son su compañía durante largos momentos en el “galponcito” de su hogar, el cual no ha cambiado desde nuestro primer contacto. Entre el trabajo de búsqueda de materiales, que en un comienzo se dio en algunos basurales y hoy también recorre estancias de su ciudad, el artista comenzó a realizar objetos ornamentales, pero poco tiempo después también objetos más utilitarios, como percheros, veladores.

En esta ocasión el artista vuelve a exponer en las paredes de Fundacruz con su obra “Patagonia Infinita”, la cual se podrá visitar durante los fines de semana hasta el próximo mes de septiembre. “Gracias a mis propias vivencias, revalorizo vestigios de estancias olvidadas. Recrear es perpetuar. Hay mucho material aguardando”.

En diálogo con TiempoSur, Walter Di Sipio, se manifestó “contento porque pasó bastante agua bajo el puente después de aquella primera muestra aquí en Fundacruz  y ahora invitado nuevamente a participar, la ansiedad está presente”.

Con relación a su actualidad, comentó: “La obra fue creciendo en cantidad, lo de la calidad lo dirá el público. Esta muestra es una muestra que tiene un cierto orden y una cierta historia. La muestra se llama ¨Patagonia Infinita¨ y el nombre se debe a su tiempo y espacio, las horas días y meses que se ha recorridos”, y continuó: “Esta Patagonia desolada, abandonada, lleva de estancias cerradas, de alambrados caídos y tranqueras inexistentes, de mucha casa destruida. Fue creada desde una casa abandonada donde por momentos habla la casa, alguno de sus habitantes y con la particularidad que la gran mayoría de las obras están hechas con materiales recogidos de estancias abandonadas. En estos últimos dos años estuve recorriendo bastante la zona”.

Por otro lado, manifestó que “tratamos de no traer a Fundacruz artículos utilitarios sino cosas más artísticas, pero en este caso era hasta necesario la exposición de estos relojes que hablan mucho del paso del tiempo. La gente va a poder conocer de la Patagonia de antes con esta obra”, y remarcó que el contacto con el público de la ciudad servirá para “explicar un poco más lo que es el concepto de la obra. Va a ser una charla interesante para los que quieran venir a consultar”.

El trabajo sigue en el mismo galpón, aunque Di Sipio aclara que “ahora es un poco más grande”, y comenta: “Decidimos con mi señora destinar otro espacio de la casa a una sala de exposición que ahora ya está invadido de nuevo con el taller. Estoy conforme con lo logrado, uno siempre está creciendo, aprendiendo y creando. Se nota la divulgación con el boca a boca, en El Calafate ya viene gente que va casa a ver la obra, a ver lo que tengo, así que muy conforme. De a poco se va creciendo”.