Sujetos a destino

Escritora de Santa Cruz finalista en Certamen Internacional de Novela Histórica

Lucrecia Pejkovic postuló “Sujetos a Destino” , una novela inédita que está ambientada en la que fue la colonia de Floridablanca, en Puerto San Julián, hace más de 300 años. Logró ser una de las cinco finalistas del certamen organizado por una editora de España, de la que participaron autores de varios países. La trama de una novela atrapante que busca ser publicada.

  • 22/09/2024 • 18:59

La escritora santacruceña Lucrecia Pejkovic logró llegar a la instancia final del Certamen Internacional de Novela Histórica “Héroes del dos de mayo”. Es la primera edición de este concurso que organiza Ediciones Rubeo, Tugia y Bresca Editores, de España, con el objeto de promover la creación literaria entre los escritores de todos los países de Iberoamérica.

Oriunda de Gobernador Gregores, Lucrecia vivió varios años en El Calafate donde concibió “La Hora Dorada”, uno de sus trabajos literarios. Anteriormente había escrito “A Cielo Abierto”. Actualmente reside en Puerto San Julián, lugar donde transcurre esta novela histórica, situada en el siglo XVIII.

“Sujetos a destino” se titula la novela histórica que Pejkovic presentó en el certamen internacional, y que resultó elegida finalista, compitiendo en esa instancia con dos autores de España, otro de Argentina y uno de Colombia.

La novela de la santacruceña está ambientada en 1780, en lo que fue la colonia de Floridablanca en Puerto San Julián. “En aquel momento la corona española decidió radicar un grupo de colonos con un proyecto agrario que les permitiera el desarrollo a esas familias y de esa manera proteger la posesión de ese territorio”, cuenta Lucrecia a Ahora Calafate.

La narración parte del puerto de La Coruña desde donde sale este contingente y llega a Puerto San Julián. “El título surge por el peso que tienen esas palabras: según el contrato que habían firmado, los colonos no podían renunciar a esa misión. No se podían volver. Y estamos hablando de que, en realidad, ellos tampoco sabían a dónde iban”, detalla.

El hilo narrativo está marcado por algunos hechos que podríamos decir que fueron reales porque provienen de fuentes como el diario de Antonio de Viedma, quien estaba a cargo de esta empresa e iba narrando cada uno de los días de la colonia.

Por otro lado, la investigación arqueológica dirigida por María Jimena Xenatore y que ella recupera en un libro que se llama Arqueología e Historia en la Colonia Española de Floridablanca, entre otras fuentes que nos van permitiendo imaginar lo que ocurrió en la cotidianeidad de esas familias en un territorio desconocido. En una Patagonia que tenía otros ciclos de producción y otro ritmo de vida.

“Además, es interesante acercarse a la convivencia de los pobladores con los Aonikenk; de qué manera los originarios facilitaron la supervivencia de los colonos y cuánto de su cultura resulta central en esta historia”, cuenta la autora  

 

Floridablanca

A lo largo de esos cuatro años que duró la colonia se presentaron muchos desafíos climáticos, cuestiones de salud, de producción. “Pero sobre todo la narración intenta dar cuenta de la lucha interna de cada personaje en ese contexto en el que se mezclan el hacinamiento y el desierto; el futuro y la nostalgia; el deseo de libertad y la culpa como condena”, afirma Pejkovic.

Consultada sobre los proyectos en relación a su novela histórica, Pejkovic señaló que “el paso siguiente es la publicación. Con la tranquilidad de que fue evaluado por un jurado especialista en la novela histórica, un género que requiere imaginación y creatividad, pero, sobre todo, mucha investigación”.

Bregamos porque la publicación pueda concretarse en el corto tiempo, sabiendo que será necesario el apoyo económico para que esto ocurra.

 

La decisión del jurado

El día 15 de septiembre pasado se reunió el jurado del I Certamen Internacional de Novela Histórica “Héroes del dos de mayo”, compuesto por Esther Carriazo (Doctora en Filología), Angélica McHarrell (Técnica Superior en Artes Gráficas), Pedro Camino (Empresario), Marisa Ortiz (Historiadora) y José Antonio Quesada (Historiador y editor.

Tras valorar la alta calidad literaria de las obras recibidas, acuerda seleccionar como finalistas las siguientes novelas:

 

Filo, contrafilo y punta, de Eduardo de la Vega (Argentina).

La peste: el mal que corre, de Juan Gómez Alcaide (España).

Publio en el país de las cataratas, de Dª Anastassia Espinel (Colombia).

Sujetos a destino, de Lucrecia Pejkovic (Argentina).

El infortunado infante, de Ignacio González-Vara Ibáñez (España).

 

Tras la pertinente deliberación, el jurado acuerda someter a votación las novelas finalistas otorgándole a cada una de ellas una puntuación del uno al diez.

Finalmente, el Jurado declaró ganador a Ignacio González-Vara Ibáñez, por su novela “El infortunado infante” (Ahora Calafate)