Historia de vida

“El básquet me salvó la vida”

Emilio Soiza, nuevo jugador de CRiGaL, contó su vivencia en el equipo federado de básquet sobre silla de ruedas más austral del mundo. Es otro año cargado de ilusiones para ellos.

  • 09/04/2018 • 12:36
Un nuevo talento se sumó a CRiGaL y está agradecido.
Un nuevo talento se sumó a CRiGaL y está agradecido.

Emilio es uno de los talentosos y sacrificados jugadores de tiene CRiGaL y en este inicio de temporada contó cómo fue su llegada, el equipo más austral que cada año hace historia, mientras que a él la de la oportunidad de seguir cambiando su vida.

 

-¿Cómo fue tu llegada a CRiGaL?

Bueno, me tuvieron que amputar ambas piernas, fui muy contenido al principio por todo el cuerpo médico, pero no fue nada fácil volver a casa en ese estado. Sentí que la vida prácticamente se terminaba para mí, pero vi en internet algo sobre CRiGaL que estaban preparando un viaje, parecía como que estaban peleando por un viaje de Liga Nacional de Básquet en Silla de Ruedas, y a partir de ahí comencé a seguirlos, vi toda su historia y videos en internet, y luego escribí en privado contando lo que me había pasado.

 

-¿Tuviste respuesta inmediata?

-Sí, fue muy bueno el trato, muy profesional, sabían que estaban hablando con alguien que no estaba en su mejor momento, al principio hablamos de tomar unos mates y así fue, el entrenador de CRiGaL me vino a ver, tomamos unos verdes, le hablé, hasta que se despachó con un “te espero en el gimnasio” y fui.

 

-¿Qué viste ahí?

-Vida, vi mucha vida, personas que han pasado por diferentes situaciones, algunas traumáticas como la mía y otras congénitas. Vi muchas ganas de entrenar, de vivir y me contagié de ese espíritu. Grandes atletas, personas que hacían con las sillas cosas realmente increíbles, competían y se esforzaban al máximo, siempre bien motivadas por el entrenador que de básquet sabe muchísimo, pero si necesitas un oído y unos verdes, también está.

 

-¿Cómo seguiste tu vínculo en CRiGaL?

 

-Lamentablemente por mi patología, doble amputado y por mi gran tamaño no había sillas deportivas para mí. Me subí a una que en realidad era para un parapléjico y si bien quedaban mis piernas expuestas, me encantó practicar los fundamentos, pero no podía competir por una cuestión de seguridad. Ese mismo año, el 2016, me tomaron las medidas y luego de un año largo, llegó mi tan ansiada silla, la espera fue terrible, pero sinceramente tenía una razón para vivir.

 

-Y cuando llegó la silla ¿qué pasó por tu mente?

El entrenador me llama y me dice: “Llegó tu silla, te espero en el Cepard”.

Fui rápido y no lo podía creer, me caían lágrimas. Me subí, me enseñaron a atarme y fue un día espectacular. Cuando me di cuenta, me acerco a Luciano y le confieso algo, muy íntimo y muy fuerte, le dije “Loco gracias, el básquet me salvó la vida”. El grupo se dio cuenta de mi felicidad, seguramente han pasado momentos como este antes que yo. Fue muy lindo, el grupo nos permite establecer momentos muy nuestros y el básquet es superación pura. Soy nuevo, pero estoy plenamente integrado, tenemos un grupo de WhatsApp donde nos ayudamos entre todos, a veces alguien no puede ir entonces los que pueden pasar a buscar al que no tiene movilidad y así con todo.

 

¿Como está CRiGaL en lo institucional?

-Mirá, me interioricé de todo, se de la gente que no está hoy y fueron muy importantes para el club. Se de Graciela, de Rubén, de Jorge Mascheroni. Lamentablemente ellos no están, pero dejaron su vida por la institución. CRiGaL está integrado por atletas, nosotros somos parte del club y creo la parte más importante, no todos se involucran en la parte dirigencial y eso hizo que el presidente Soto no pueda ser reelegido, por eso hoy estamos funcionando con una comisión normalizadora, pero tenemos todos los balances aprobados por AFIP, estamos modificando algunas cosas para que los dirigentes más viejos e interesados en lo dirigencial puedan seguir, nosotros nos dedicaremos a entrenar y a apoyar todo lo que tenga que ver con lo mejor para el club. Pero estamos muy bien, muy pronto estará la nueva comisión del club en funciones.

 

-Si bien sos nuevo, ¿cómo van tus entrenamientos y qué nivel de juego estás alcanzando?

-Mirá, soy muy nuevo, pero debuté en Primera, y eso no me lo saca nadie, fueron pocos minutos, pero fue algo muy lindo, mucho apoyo del entrenador y mis compañeros, estaba muy nervioso. Todo salió bien y ahora no lo puedo creer, estamos preparando un viaje al Monumental, a jugar con River Plate en Buenos Aires.

 

-¿Y cómo va ese tema?

-Sé que están en la pelea, tenemos la Comisión Normalizadora en funciones desde el 2 de marzo, la Secretaría de Deportes está gestionando al respecto, todavía no tenemos novedades, pero creo en este gobierno, están ayudando muy fuerte al Hispano Americano, algo que está bueno, pero no creo que nos dejen sin la participación justo a nosotros. No conozco al Secretario de Deportes, si confío en este Gobierno y principalmente en la Gobernadora que es prácticamente la madre de este proyecto que nació en 1999.

 

-¿Se puede decir que hubo un antes y un después del básquet Emilio?

-Que te parece. Ojo, no soy el único, hay muchos casos en CRiGaL, Vanesa, Guillermo, Marcos, el mismo Lucianito que tiene 15 años, y debutamos juntos en Primera, a todos el básquet nos ha cambiado la vida y como te dije antes, a mí personalmente, me dio un motivo, un hermoso motivo para seguir viviendo.

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