A siete años de la gloria eterna

Se cumplen siete años de aquel momento histórico e inolvidable en donde toda Santa Cruz se detuvo para vivir el juego definitorio, ante Barrio Parque, y coronar el ascenso a la Liga Nacional de Básquet. Bernardo Murphy, entrenador Celeste, revivió ese momento junto a nosotros.

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Ahora a jugar y mucho en casa

TS - "¿Qué recuerdo se te viene a la mente cada 8 de junio?"

BM - "Siempre es un día de mucha felicidad, un día de sentarse un rato a mirar los recuerdos, las fotos, revivir momentos. Pero no solo eso, que fue la culminación, sino también lo iniciado con el ascenso al TNA, antes al federal. Ese equipo, que fue un poco el puntapié inicial para poder llegar acá".

TS - "¿Cómo fue el proceso para llegar al ascenso?"

BM - "Desde la conformación del equipo, creo que logramos mezclar juventud y experiencia. Mezclamos un mix de jugadores, que por lo menos nos aseguraba ser competitivos y después nos convertimos en un equipo. Que creo que fue lo más importante, el equipo. Más allá de las individualidades, más allá de todo, el equipo siempre salió adelante".

TS - "¿No fue una temporada sencilla, verdad?"

BM - "Fue una temporada en la cual nos costó mucho ganar de visitante, y el equipo apareció en el momento que había que aparecer. Ya en el Playoff con Atenas de Patagones el equipo barrió de visitante, y a partir de ahí, hicimos unos Playoff que no conozco estadísticas, pero inolvidables. Porque llegamos a la final habiendo barrido las tres series con desventaja de cancha, lo cual es increíble, y habla un poco de la madurez y la hombría de ese equipo, de esos jugadores, que llevaron adelante casi una epopeya".

TS - "¿Qué recordás de Hispano como institución desde tu llegada a ese ascenso a la Liga Nacional?"

BM - "Te diría que se fue convirtiendo en un Club ejemplar, un lugar modelo, un gran lugar para trabajar, en el que todos quieren estar ahora, y eso, en gran parte se debe a sus dirigentes, a la gente, a lo que ellos hacen, que te hacen sentir como en tu casa, te brindan todas las comodidades. Y ese año no fue la excepción, ese año fue la solución de los problemas, la logística, que siempre es muy difícil ahí en el sur, estando tan lejos de todo, es muy complicado y la resolvían".

TS - "¿Cuál crees que fue el secreto de ese logro único?"

BM - "La verdad que creo que un poco el secreto del éxito de esa temporada fue la combinación entre el equipo, los dirigentes, o sea, el club y la gente. La gente que nos acompañó siempre cuando íbamos lejos, nos acompañaba de los mensajes cuando jugábamos en casa, el Tito Wilson que explotaba, Así que la verdad, creo que se dio esa comunión, que es importante, y que tendría que ser una condición sine qua non para poder lograr algún objetivo".

TS - "El día de la final fue un día especial, repleto de emociones. ¿Cómo lo recordas?"

BM - "Un día de mucha ansiedad, además hubo un corte de luz, increíble. Hay una foto que cada vez que la veo siempre me causa mucho placer, que es una que yo estoy espiando por la ventana del vestuario mirando al "Tito Wilson", que estaba repleto. Y que nos generaba, aparte esa sensación de felicidad de verlo así, un compromiso más grande para ese quinto partido, que era muy difícil. La verdad que lo sacaron adelante los chicos de una manera brillante. Así que todas hermosas sensaciones, recuerdos inolvidables, de gente, de momentos, de sonidos, la chicharra final, de esos abrazos inolvidables".

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TS - "¿Qué significó en tu carrera el ascenso a la Liga Nacional con Hispano?"

BM - "Estoy agradecido de haber sido parte de ese grupo, de ese equipo, haber formado parte de este club maravilloso, y recordando todos los ocho de junio este campeonato dificilísimo de lograr y que, por suerte, lo pudimos tener nosotros".