Boxing le guarda un lugar a un “crack” goleador
Se trata del comodorense, Luciano Sanhueza, quien terminó como goleador de la zona patagónica del último Federal “C” jugando para Independiente de Puerto San Julián y luego se sumó para aportar sus goles en el equipo “Albiverde” que mañana puede ser campeón del torneo apertura. Esperan que siga en el club.
Encontrar un goleador para competir en el fútbol de ascenso no es fácil y es por eso que el Boxing mostró un rápido interés por Luciano Sanhueza, un joven de sólo 21 años que ya tiene un amplio recorrido por el fútbol argentino e internacional y que terminó como goleador de la zona patagónica del último Federal “C” jugando para Independiente de Puerto San Julián.
Al término de ese Federal “C”, Luciano recaló en las filas del Atlético Boxing Club, donde jugó seis partidos y marcó seis goles, ganándose rápidamente la confianza del cuerpo técnico y los dirigentes del club, que ahora tienen mucho interés en retenerlo para el Torneo Regional Federal Amateur que la institución encarará el próximo año.
SU HISTORIA
Sin embargo, la historia de Luciano, un nueve de esos altos y potentes (mide 1.87), comenzó hace ya unos cuantos años más precisamente a los 16, cuando lo hicieron debutar en la Primera División de Huracán de Comodoro, donde juntó los viáticos que se entregaban a los jugadores para luego emprender su sueño como futbolista profesional.
“Allí conocí a una persona que me dijo que tenía condiciones y que tenía que esforzarme para llegar a algo importante”, le contó Luciano ayer a TiempoSur en la pensión del club, donde pasa sus días recuperándose de una contractura en el isquiotibial de una de sus piernas producto de haber intercalado partidos en Boxing y Scout de Punta Arenas (marcó 11 goles en 9 partidos) durante las últimas semanas.
Por aquel entonces, con 16 años emprendió su travesía hacia Talleres de Córdoba, donde logró consolidarse aprendiendo mucho de fútbol, y entrenamiento.
“Allí aprendí mucho. Hasta algunas palabras que nunca hubiera conocido jugando en otro club, porque estaban en todo tenían psicólogos y todo tipo de profesionales”, recordó.
De talleres, Luciano pasó a Quilmes, donde comenzó jugando en la reserva de AFA, pero entrenando con la Primera y con aspiraciones a consolidarse, pero fue en ese entonces cuando se enteró que su madre se había enfermado de cáncer y no lo pensó dos veces antes de regresar a Comodoro Rivadavia para acompañarla en el momento más difícil.
Con el tiempo las cosas se normalizaron y el delantero pasó por diferentes clubes como Olimpia de Itá y 3 de Noviembre de Paraguay, donde tuvo otra fea experiencia, pero esta vez con el gerenciador de la institución, quien terminó debiéndole una parte importante del contrato.
En la búsqueda de una revancha para encontrar el camino que lo lleve a lo más alto del fútbol nuevamente, pero sin chances de sumarse a alguna institución de las más importantes del país por la época del año, Luciano llegó a las filas de Independiente de Puerto San Julián, donde se lució siendo un pilar del equipo que llegó a los “Playoff”, cayendo con Sarmiento en una polémico cruce por lo perjudicado que fue el equipo santacruceño por los árbitros.
Pese a no progresar en esa serie, a Luciano le sobró para terminar como el goleador de la zona patagónica del Federal “C” y llamó la atención de los dirigentes de Boxing, que rápidamente fueron en su búsqueda para reforzar su plantel, logrando convencerlo al menos para el final del torneo local en la Liga de Fútbol Sur, donde Sanhueza terminó marcando goles importantes.
EL PRESENTE
Por estos días, Luciano se recupera de la contractura y no podrá estar mañana, cuando Boxing juegue un postergado con Unión Santacruceña, con la posibilidad de ser campeón del torneo apertura con sólo empatar.
Es por eso que aprovechará para viajar a Comodoro Rivadavia y ver a su familia para luego retomar su carrera futbolística.
Según contó Luciano, hoy se reunirá con Leonardo Mata para definir su probable continuidad en el club si no surge una chance mucho más importante en el fútbol argentino.
En el Boxing le guardan su lugar y esperan contar con él, asegurando que es “un delantero potente” con un futuro enorme.