Desembarco "Pirata" en Río Gallegos

Después de tres largos años, el "Celeste" volvió a primera división. Luego de un campeonato memorable y a falta de tres fechas, Belgrano llegó a los 73 puntos, lo que le permitió, y en virtud con la diferencia con su más cercano rival, lograr el tan ansiado ascenso a Primera.

Una verdadera marea de hinchas viajó 400 kilómetros desde Córdoba hasta San Nicolas, en donde Brown de Adrogué ofició de local. Según los organizadores, 22 mil hinchas coparon el estadio y, no sin antes sufrir, gritar campeones y volver a la élite del fútbol argentino. A más de 2.500 kilómetros, también hubo festejos.

"Embajada Celeste" en Río Gallegos

Si algo caracteriza a "los equipos grandes del interior", es que, en cada rincón del país, hay un hincha. Y como no podía ser de otra manera, Rio Gallegos y el romance con Belgrano no es la excepción.

Durante las más de 30 fechas de este certamen y hace ya varios años, siempre que juega "el Pirata", hay reunión de hinchas. Esta confluencia en torno a los colores hizo que lo que comenzó como una excusa para compartir la pasión y el tradicional asado, tome forma "legal" y hoy cuente con la filial Santa Cruz en vías de aprobación. La misma llevará el nombre de "Zurdo" Velázquez, un histórico de los de Alberdi y tiene integrantes de toda la provincia.

Ese grupo de incondicionales, que ronda entre los 15 y 20 "infaltables", dijeron presentes en la tradicional esquina de nuestra ciudad. Al ritmo del "Potro" Rodrigo y con alguna bebida espirituosa servida en los tradicionales e improvisados vasos con botellas de gaseosa vacía, le pusieron color y calor a la memorable tarde. Es que el ascenso año tras año parecía lejano, y hoy es una realidad.

Diego, referente de los "Piratas Patagónicos" le cuenta a TiempoSur el origen de este grupo: "todo nació en el 240, en la casa del gringo Diaz, ahora mudamos la sede al barrio Los Álamos. Esto fue soñado, para mí poder vivirlo con mi viejo y mis hijos y todos los que nos juntamos, las sensaciones son únicas"

Con los ojos visiblemente emocionados, hoy de alegría, Diego agradece a quienes desde tan lejos mantuvieron viva la ilusión de la vuelta: "Yo siempre digo que es fácil ser de River o de Boca, pero de Belgrano es distinto, se sufre mucho. Cuando jugó en Madryn viajamos un grupo de hinchas desde acá, así que estamos planeando ir al último partido en Córdoba. Gracias a Coco, Franquito, Miguel, Gusti, Guille, Dieguito, Luchi, El Gringo Diaz, Marquitos, Nahuel, Gonza, y Renzo León, el más chico de los piratas"

Historias de pasión por la camiseta que, en el sur del país, también existen. Historias que muestran "lo mejor del amor", como cantaba Rodrigo y que un grupo de hinchas hicieron de sus letras una bandera que flamea al ritmo del viento de nuestra geografía.