CNMV-Economía

Delimitan el grado de conocimiento que tienen los españoles sobre las criptomonedas

El panorama dibuja una tendencia alcista que va camino de consolidarse.

  • 14/04/2023 • 12:54

Esta es la primera conclusión a la que uno llega cuando observa el interés de los españoles por el uso de las monedas virtuales, que ha pasado de ser una simple anécdota a transformarse en un quebradero de cabeza para las monedas reguladas. Según los datos ofrecidos por el Banco de España, el volumen de transferencias que se produjeron el curso pasado en territorio nacional en torno a este tipo de activos supuso un movimiento económico de más de sesenta mil millones de euros.
 
 
 
Para percibir la dimensión real de esta cifra sólo hay que tener en cuenta que se trata del cinco por ciento del Producto Interior Bruto y del tres por ciento de todas las transferencias económicas que tuvieron lugar en este país a lo largo del ejercicio pasado. Además de esto, conviene aclarar que esos sesenta mil millones representa la décima parte de todo lo que se cuece en el circuito cripto dentro de Europa. Con estas coordenadas marcando el escenario, el interrogante que surge no admite concesiones: ¿cuánto saben los españoles sobre monedas virtuales?
 
La clave llega de la mano de la encuesta que presentó para este curso la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), cuyas conclusiones no dejan lugar a dudas: el setenta por ciento de los ciudadanos considera que entiende perfectamente qué son las criptomonedas y cuál es su funcionamiento. Estamos ante un dato que proviene de un sondeo en el que se han entrevistado a más de mil quinientas personas, una muestra bastante representativa en la que predominan los varones con menos de cuarenta años de edad.
 
Más allá de esta cifra, el Banco de España también aporta otro número que no pasa desapercibido, y es que según la entidad, doce de cada cien españoles acumulan en su monedero electrónico alguna divisa virtual. Si bien es cierto que estas monedas continúan circulando al margen de los circuitos oficiales del mercado bursátil, su progresión sigue disparada, llegando incluso a producir seis veces menos de lo que se genera en las bolsas de Madrid, Bilbao, Barcelona y Valencia. Los volúmenes todavía no son equivalentes, pero el auge de las criptomonedas sigue su curso al mismo tiempo que la compraventa de acciones ha caído este año más del diez por ciento.
 
El informe elaborado por la CNMV pone también el foco en la forma en la que los usuarios se mueven dentro de la escena cripto. La información resultante es tampoco defrauda: siete de cada diez españoles aseguran haber invertido en estos activos varias veces y sin necesidad de tener un respaldo económico fuerte. Del otro lado está el treinta por ciento restante, un grupo de encuestados que declara haber sucumbido al encanto de las criptodivisas sólo en una ocasión.
 
Dentro de los movimientos más cotidianos que forman parte del día a día en el universo de este tipo de monedas, llama la atención lo numerosas que son las transacciones realizadas en épocas de grandes eventos deportivos. Sólo durante la última jornada del pasado Mundial de fútbol el volumen de operaciones con fan tokens creció más del ciento ochenta por ciento. Esto, unido al buen ritmo de participación que mantuvieron las casas de apuestas con bitcoin durante esas fechas, da cuenta de lo impregnada que está la actualidad de este modelo de divisas, máxime cuando el dinero tradicional sigue devaluándose en los mercados centralizados.
 
La encuesta llevada a cabo por la Comisión señala de igual modo que el cuarenta por ciento de los españoles posee alguna moneda digital en su e-wallet, aunque por norma general lo depósitos no suelen rebasar los cien euros invertidos. Resalta el papel del sector femenino mayor de treinta años, que en un principio no manifiesta un gran interés por las criptomonedas, pero tampoco les daría de lado a medio plazo si se reduce la volatilidad.
 
 
Por último, cabe reseñar, según los datos recogidos, cuáles son las razones predominantes que llevan a los usuarios nacionales a adentrarse en esta aventura económica. La principal suele ser el propósito de alcanzar rentabilidades elevadas en periodos de tiempo reducidos. La segunda también está clara: tener la certeza de que estas monedas constituirán a medio plazo el modo de pago más fuerte en todo el mundo.