La inflación en la Patagonia y su diferencia con el resto de Argentina en 2024

En particular, la región patagónica mostró una dinámica inflacionaria algo diferente, con un incremento de precios superior al promedio nacional. Este informe busca explorar las causas de esta disparidad y analizar cómo factores locales influyen en los costos de vida en la Patagonia frente al panorama general del país.

Una Brecha Inflacionaria Regional

Durante 2023, Argentina experimentó una inflación alarmante del 211,4%, una cifra récord. Sin embargo, la situación fue algo más moderada en la Patagonia, donde la inflación acumulada durante el año pasado fue de aproximadamente un 207,7%. Aunque ambas cifras fueron extremadamente altas, la Patagonia registró una inflación algo menor que el promedio nacional.

En 2024, la situación mostró un contraste. El gobierno nacional logró reducir la inflación a un 117,8%, mientras que, en la Patagonia, la inflación acumulada durante el año fue del 124,7%. Aunque ambas cifras fueron menores en comparación con 2023, la diferencia entre la inflación regional y la nacional se mantuvo, con la Patagonia registrando un aumento más alto.

En diciembre de 2024, la inflación mensual en la Patagonia fue del 2,6%, ligeramente inferior al 2,7% registrado a nivel nacional. Esta diferencia, aunque pueda parecer marginal en cifras absolutas, refleja un impacto significativo en el poder adquisitivo de todos aquellos que habitan la Patagonia, donde los productos y servicios suelen ser más costosos debido a factores como:

• Logística y transporte: la lejanía de los grandes centros de producción incrementa los costos de distribución.
• Clima extremo: los gastos en calefacción y energía son más elevados durante gran parte del año.
• Menor competencia comercial: en varias localidades, la oferta limitada de bienes y servicios también impacta en los precios.

Factores que Influyeron en 2024

El gobierno de Javier Milei y su equipo económico, liderado por Luis Caputo, atribuyó la desaceleración inflacionaria a medidas como la reducción del gasto público, la estabilización del tipo de cambio y la apertura de mercados. Sin embargo, en la Patagonia, hay algunas particularidades que contribuyeron a una inflación más elevada.

Puede hablarse, por ejemplo, de las subas en servicios regulados. Tarifas de servicios públicos como electricidad y gas mostraron aumentos significativos, dada la dependencia de estos en climas fríos.

También puede hacerse mención a los aumentos en los combustibles. La Patagonia, a pesar de ser una región productora de energía, enfrentó incrementos en combustibles que impactaron en la logística. Además, puede mecionarse el turismo estacional: la alta demanda de bienes y servicios en temporada alta turística también presionó los precios al alza.

La necesidad de pensar en las economías regionales

La brecha inflacionaria entre la Patagonia y el promedio nacional pone en evidencia la necesidad de políticas económicas que consideren las especificidades de las economías regionales. Aunque el descenso inflacionario en 2024 es un avance importante, la Patagonia enfrenta desafíos particulares que requieren atención para garantizar una recuperación equitativa. (Crónica)