"La obesidad aumentó en todo el país"

El pasado 17 de octubre se conmemoró el Día Nacional de la Lucha contra la Obesidad, fecha que se estableció para concientizar y sensibilizar a la población sobre una problemática que tiene consecuencias que derivan en enfermedades que pueden resultar mortales. En este marco, el Dr. Pedro Martínez Duarte, jefe del Servicio de Cirugía bariátrica y metabólica en Hospital Universitario Austral, dialogó con este medio, y expuso que se debe saber que la obesidad es una enfermedad crónica, incurable, y que no depende de la voluntad de la persona para poder resolverlo, pero que contratamiento médico se puede mejorar la calidad de vida del paciente. 

La obesidad y el sobrepeso se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa perjudicial para la salud. Y el índice de masa corporal (kg/m2) es el número que permite identificar sobrepeso y obesidad tanto a nivel individual como poblacional. Así, la Organización Mundial de la Salud (OMS) define el sobrepeso como un IMC igual o superior a 25 y la obesidad igual o superior a 30. Pero, más allá de cuestiones teóricas y académicas, la obesidad es hoy una de las pandemias mundiales que mayor impacto tiene en el sistema de salud: conlleva la aparición de numerosas patologías y altera significativamente la calidad de vida de quienes la padecen. El profesional expuso que la obesidad es multifactorial, en donde la genética, la descendencia, la oferta comercial rica en grasas y el sedentarismo.

Son factores que llevan a que la obesidad sea una pandemia.

En la Argentina, apuntó, hay una alta prevalencia de esta enfermedad, tendencia que penosamente se están dando en todo el mundo.

En ese contexto el país presenta el mayor índice de obesidad infantil en América Latina y es uno de los cuatro países que más azucares consume en el mundo, según datos oficiales de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo reveló que 6 de cada 10 adultos registran exceso de peso y 2 de cada 10 obesidad. Además, que en niños y niñas en edad escolar, el 30% tienen sobrepeso y el 6% obesidad.

Según ese mismo estudio, la obesidad en Argentina pasó en 8 años de afectar un 14% a un 20% en la población adulta, lo que implica un aumento de un 42%. Si a este número se suman las personas con sobrepeso, se calcula que un 60% de la población en Argentina tiene exceso de peso, con el riesgo para la salud que esto implica a nivel individual y poblacional.

Causas y factores de riesgo

La obesidad se presenta con el transcurso del tiempo, cuando se ingieren más calorías que aquellas que se consumen. El equilibrio entre la ingestión de calorías y las calorías que se pierden es diferente en cada persona. Y esa diferencia puede tener distintas causas. Entre otros, aparecen la constitución genética, el nivel de consumo de alimentos ricos en grasas y la falta de actividad física.

Pero la obesidad –como también el exceso de peso- también puede estar relacionada con: un desbalance energético, la predisposición hormonal o un metabolismo basal bajo. Además, influyen el medioambiente, la descendencia y cultura del paciente, el sedentarismo y la tecnología.

Enfermedades asociadas

A mayor índice de masa corporal, mayores probabilidades hay de que el paciente obeso padezca otras enfermedades o, incluso, sufra una muerte temprana. Algunas enfermedades asociadas a la obesidad son: Diabetes tipo 2; Hipertensión arterial; Dislipemia; Apneas del sueño; Asma; Colesterol o triglicéridos elevados; Enfermedades Cardíacas; Hígado graso (puede evolucionar a una cirrosis aunque el paciente no haya tomado alcohol);  Lumbalgia; Cervicalgia; Síndrome de ovario poliquísitico, infertilidad; Reflujo gastroesofágico; Incontinencia urinaria;  Varices venosas; Enfermedad degenerativa de las articulaciones; Litiasis vesicular; Depresión; Gota; Cáncer (existe evidencia de que determinados canceres están vinculados a la obesidad, como por ejemplo el cáncer de endometrio, mama, colon, entre otros).

Prevención

La mejor forma de tratar la enfermedad es previniéndola, identificar precozmente a aquellos pacientes que empiezan a mostrar cambios en su peso. En ese caso, el médico debe estar atento y sugerir normas alimentarias, modificaciones en los hábitos y conductas, ejercicio físico y terapia farmacológica si fuera necesario.

Para los adultos es recomendable realizar ejercicio aeróbico durante al menos 30 minutos al día, tres veces a la semana; y para los chicos en edad escolar se recomienda al menos una hora al día de ejercicios o juegos que involucren actividad física.

La cirugía bariátrica, además, es el tratamiento más efectivo contra la obesidad ya que supone una tasa de éxito a largo plazo superior al 80%, comparada con el 3% de los tratamientos médicos o nutricionales habituales.