Por ordenanza prohibieron colocar sal en las mesas de los restaurantes

En la última sesión del Concejo Deliberante y luego de tener despacho favorable de las comisiones correspondientes, los ediles aprobaron un proyecto de ordenanza que prohíbe la colocación de sal en las mesas. El extracto del expediente reza “la prohibición de colocar cloruro de sodio (sal) en mesas, barras y lugares de atención al público en locales comerciales de venta de alimentos listos para consumo”. Fue presentado por la concejal María Laura Santamariña. Anteriormente, en la ciudad se creó el programa “menos sal, más vida”, que justamente trataba sobre la importancia de reducir el consumo del producto en pos de la salud del individuo.
El proyecto “propone eliminar el cloruro de sodio (sal) de las mesas y barras de restaurantes, confiterías, bares, pizzerías y demás locales en donde se expendan alimentos listos para el consumo. No obstante se establece la obligación, de parte de los comercios antes señalados, de disponer de sal común en sobres cuando el cliente expresamente así lo requiera, como así también de sales dietéticas”.
El expediente se suma a las otras legislaciones que buscan regular el comercio en relación a los alimentos. Días atrás, por ejemplo, se conoció un expediente que busca que los comercios también ofrezcan por obligatoriedad alimentos para diabéticos. Asimismo, en el año 2011 comenzó a regir la Ley de Celiaquía, y en la ciudad los supermercados y demás casas de comida ofrecen alternativas para personas con esta enfermedad.

Nivel nacional y datos
Desde el Instituto Cardiovascular de Buenos Aires difundieron que en condiciones normales todos tenemos una presión arterial que nos caracteriza y que varía dentro de ciertos límites. Cuando la presión está elevada en forma persistente el paciente presenta hipertensión arterial.
Conviene saber que la presión tiene dos componentes, la presión sistólica o máxima y la presión diastólica o mínima. Cuando nos informan el valor de presión siempre se dice primero la máxima y luego la mínima (Ej.: 140/90 o 14/9 como se dice habitualmente).
En personas mayores de 65 años es frecuente detectar una elevada presión máxima con una presión mínima normal (Ej. 180/80), pero esto no es una condición normal y de hecho constituye un factor de riesgo de enfermedad y muerte. Hoy sabemos que la presión en los ancianos, al igual que en los adultos más jóvenes, no debe ser mayor a 140/90.

Menos sal, más salud
Así, una iniciativa del Ministerio de Salud persigue disminuir el consumo de sal de la población en su conjunto para reducir la importante carga sanitaria que representan las enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares y renales. Constituye una de las principales acciones de promoción de la salud y forma parte de un plan integral de prevención y control de enfermedades crónicas no transmisibles.
El Ministerio de Salud de la Nación firmó un acuerdo que establece que el sector industrial de alimentos reducirá de manera voluntaria y progresiva el contenido de sodio en los cuatro grupos de alimentos procesados prioritarios, integrados por los productos cárnicos y sus derivados
-entre los que se encuentran chacinados cocidos y secos, y embutidos y no embutidos-; los farináceos como galletitas, panificados y snacks; los lácteos, incluyendo una gran variedad de tipos de quesos; y las sopas, aderezos y conservas.