Carta documento dirigida al presidente de la CPS

A una semana de que Viviana Carabajal, vocal por el sector pasivo ante la CPS, hiciera pública en redes sociales una carta abierta, apuntando contra el presidente de la Caja de Previsión Social, Marcial Cané, en esta ocasión TiempoSur pudo confirmar, a través de su representante legal, el Dr. Cristian Arel, que la vocal ha hecho llegar al titular de la caja una carta documento.

Tal como había denunciado la semana pasada, en su carácter de vocal por los pasivos, “el presidente de la Caja de Previsión Social, informó que no puedo realizar ningún tipo de trámite ante las distintas oficinas técnicas que componen nuestra Caja de Previsión, inherente a los diferentes reclamos diario que me hacen jubilados, retirados o pensionados, porque primero debe ser canalizado por la oficina del presidente para que lo conteste o autorice él o su gerenta”, situación contraria a lo que establece la ley provincial.

No ha mejorado la situación en los últimos días y a pesar del diálogo, incluso Carabajal ha expresado recientemente que “son días muy difíciles, es feo trabajar en un ámbito laboral tan hostil. Ante el cambio de gestión me encuentro con que hay un presidente con una óptica totalmente diferente a la mía. Nos pusimos a disposición tratando de mantener el diálogo cordial, como corresponde, pero tras las declaraciones respecto a un posible cambio de la ley, es donde empiezan las diferencias y a cortarse el diálogo”, y continuó: “Se fueron agravando las cosas, cada vez con menos diálogo, pero lo que me molesta mucho es la forma en la cual se dirige a las personas. Necesitamos una presidencia de puertas abiertas”.

TiempoSur pudo confirmar la presentación de una carta documento a través del abogado de la vocal, Cristian Arel. “Está dirigida al presidente de la Caja de Previsión, Marcial Cane, intimando a cesar con todo tipo de hostigamiento y violencia, como así mismo el entorpecimiento que realiza a la tarea de la vocal”, comentó al explicar que “las labores que realiza la vocal están amparadas por la Ley 1.782. En un Estado de derecho, en el cual vivimos, este tipo de actitudes no son aceptadas. Por lo tanto, si no cesa con el comportamiento nos veremos obligados a realizar las acciones legales correspondientes”.

“Nos presenta mucha preocupación esta actitud. Un grupo de jubilados se acercó para hablar por esta situación que fue de público conocimiento, donde en vez de apaciguar las aguas, se los trato mal, incluso tornándose todo muy violento. Si no se cortan estas actitude, estamos obligados a realizar las acciones legales”, comentó Arel.