Esos antiguos monoblocks
El sector de departamentos es uno de los más antiguos en Río Gallegos. Conformados dentro de un barrio ya reconocido, tiene su propia realidad e historia. Un incendio hace diez años que complicó a una veintena de familias.
Quien vive en Río Gallegos hace algunos años ya ha escuchado nombrar alguna vez los famosos “400”. Se trata de esos monoblocks ubicados al ingreso de la ciudad, en Autovía y calle Corrientes. Inaugurados hace décadas en un plan de viviendas, los monoblocks tienen un peso de historia importante sobre sus hombros. Varias familias han pasado por allí, muchas en alquilados y algunas propietarias han quedado. Haciendo un repaso por los suplementos de los fines de semana donde damos a conocer los barrios de la ciudad, muchos de ellos comparten aristas en común con la problemática planteada por los vecinos y “los 400” no son la excepción. Incluidos dentro del barrio Jorge Newbery, un poco de su historia.
Reclamos
Los vecinos del lugar han comentado en diálogo con TiempoSur que se mantienen los reclamos normales del día a día, que no solamente tienen que ver con el estado de algunos de los conjuntos habitacionales –principalmente los espacios en común entre los monoblocks- sino también lo que tenía que ver con el estado de las veredas y las calles linderas. Desde el Municipio han tenido que asfaltar y bachear en reiteradas ocasiones a calle Corrientes como así también la calle Ameghino y los pasajes que las cortan. A lo largo de los días han reiterado además que la utilización de contenedores de basura hace que los ciudadanos que residen allí –pero también de zonas cercanas- arrojen una importante cantidad de basura, lo que termina en una acumulación constante. Si a la fórmula se le agrega la variante de los perros sueltos da como resultado un escenario común en toda la capital santacruceña.
Incendio que lo cambió todo
En el mes de enero del 2010, un incendio destruyó un total de 15 viviendas, afectando así a una importante cantidad de familias. Desde ese entonces hasta la fecha, las mismas quedaron sin hogar debido a las pérdidas totales. Allí comenzó una odisea de los ciudadanos para recuperar su hogar, en lo que derivó en pedidos a la entonces gestión del IDUV, el hecho de tener que vivir en casas alquiladas por el Estado y la necesidad de la reconstrucción del lugar.
Desde el IDUV tuvieron que hacer un informe habitacional, algo que demoró su tiempo. Dicho estudio determinó que los hogares pueden ser reconstruidos y re-habitados.
Según reveló un informe, los departamentos presentan fisuras en las losas, no por el incendio, sino por la demolición. Asimismo, confirmaron que una gran parte del daño en el lugar no se debía al fuego, sino a la falta de mantenimiento durante años. En este sentido, desde el IDUV (en la primera parte de la década del 2010) se explicó que hay una gran cantidad de daños menores que jamás fueron reparados, como los pisos, las puertas y paredes.
Dicha información fue revelada a los afectados en el invierno de 2010.
Desde el primer momento que se destruyeron los departamentos, el Gobierno provincial consiguió alquileres y los subsidió, con una inversión inicial de 300 mil pesos que se fue incrementando a medida que pasaban los meses. Los vecinos señalaron que, más allá de esta solución, buscaban algo más sólido como tener la casa propia.
Reparación de calles
La Municipalidad de Río Gallegos se encuentra realizando un intenso trabajo en la zona de calle Corrientes y alrededores. Trabajadores de la Dirección de Saneamiento Ambiental comenzaron el sábado con un operativo de limpieza de calles y cordones, que continúa hasta la actualidad, abarcando una amplia área que incluye también partes de la Autovía. Al respecto, desde el área destacan la labor realizada por los trabajadores municipales, a la vez que resaltan la buena respuesta de los vecinos, a quienes solicitan que depositen los residuos sólidos urbanos en los lugares correspondientes y colaboren en el mantenimiento de la limpieza de los contenedores de basura.
Cabe destacar que la tarea involucra a una gran cantidad de trabajadores con el apoyo de maquinaria específica y que no sólo se hace la limpieza, sino que también se atienden situaciones puntuales a través de la Inspectoría de Saneamiento Ambiental.
La lucha contra el Coronavirus
En el gimnasio del Colegio N°16, se presentó el equipo que forma parte del plan DetectAr -iniciativa del Gobierno nacional donde se busca activamente a personas con dos o más síntomas asociados al COVID- integrado por profesionales de Salud de la cartera sanitaria nacional, agentes de Dispositivos Territoriales de la provincia, y personal de la Secretaría de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Río Gallegos, todos acompañados por la Policía Provincial. El objetivo es testear a los vecinos para encontrar casos de Coronavirus y frenar contagios.
El operativo comenzó pasadas las 10:00 y se extenderá por dos días en el amplio sector que comprenden las inmediaciones de los 400 Departamentos. En el lugar, el secretario de Estado de Dispositivos Territoriales, Jorge Ferreyra, expresó que continúa la articulación interinstitucional para llevar adelante el trabajo territorial y de concientización, en domicilios y comercios, en este caso, en la zona que comprende a los 400 Departamentos.
“El programa DetectAr es intenso en cada sector. El trabajo lo realizamos de manera integral junto con profesionales del Ministerio de Salud de la Nación, profesionales de la Provincia y personal del Municipio. Es una tarea silenciosa pero efectiva, ya que no sólo llevamos la herramienta de los testeos rápidos, si no que la gente de la Municipalidad hace el soporte en lo referido a concientización, brindando información en los comercios y a los vecinos que se encuentran en la vía pública sobre todas las medidas sanitarias a tener en cuenta para protegerse”.
Historia
Jorge Alejandro Newbery fue una de las figuras clave del siglo XX para la Argentina: Hace poco más de cien años se convirtió en el primer ídolo popular no político por sus hazañas aéreas y deportivas. Pero su nombre también está asociado al desarrollo y la modernización del sector eléctrico en el país, por eso el 27 de mayo se celebra el Día del Ingeniero Electricista en honor a su nacimiento.
Nació en 1875, hijo del odontólogo estadounidense Ralph Newbery y la argentina Dolores Malargie en una casona ubicada sobre la calle Florida, en el corazón de Buenos Aires. A los 15 años terminó el bachillerato y viajó a Nueva York para comenzar la carrera de ingeniería en la Universidad de Cornell. De allí pasó al Drexel Institute de Filadelfia, donde fue alumno de Thomas Alva Edison y obtuvo el título de ingeniero electricista en 1895.