Frontera chilena: el exponencial aumento de flujo vehicular hacia el país trasandino
El movimiento de vehículos durante diciembre de 2022 fue casi el triple del mismo mes de 2021. Lo mismo se espera para enero de este año, debido a la flexibilización de las medidas, dado a la no exigencia de la libreta sanitaria por Covid-19.
La flexibilización de las medidas sanitarias por la pandemia por Covid-19 impactó -como se esperaba- directamente en la cantidad de visitantes que cruzaron la frontera al país vecino.
Si bien en 2021 el turismo se incrementó luego de las restricciones del primer año de pandemia, todavía los países mantenían requisitos ineludibles, como la presentación de la libreta de vacunación. Por eso, en el paso Monte Aymond, de acuerdo a la información brindada por Claudio Alvaradejo, secretario del gremio de Aduanas de Punta Arenas, el flujo vehicular se duplicó y triplicó en 2022 y en los primeros cinco días del 2023.
"El flujo vehicular en relación al 2021 se ha incrementado en un 70%", sostuvo Alvaradejo a TiempoSur.
Para tener una idea del aumento en el movimiento de viajantes, hay que tener en cuenta que durante todo el mes de enero de 2022, cerca de 700 vehículos cruzaron la frontera chilena, y este 2023, en solo cinco días lo hicieron 125 automóviles.
"Esto nos hace sentir que si bien la pandemia no ha pasado, como no hay controles sanitarios en las fronteras, el aumento fue exponencial", analizó, y recalcó que "desde enero, Chile no tiene autoridad sanitaria en la frontera" (lo que fue adelantado por este medio días atrás).
"Estas libertades hacen que el flujo de vehículos para ingresar aumente, más que duplicándose", añadió.
Dentro de las recomendaciones, marcó que si bien la frontera funciona de 8 a 0 horas, el turista debe llegar por lo menos una hora antes al complejo. "El control no es integrado y mientras se demora en un complejo, los otros (del otro complejo fronterizo) deben estar de salida o entrada de su país, y eso obliga que los conductores deban tomar esta precaución de estar una hora antes del cierre de la frontera".
Alvaradejo opinó que -por lo menos en el caso del complejo chileno- no es necesario que el paso fronterizo este abierto durante las 24 horas. "No hay movimiento que los justifique, por eso apostamos a que funcione hasta las doce de la noche".
Otros factores, más allá de la época de temporada alta, redundarán en un mayor movimiento en la frontera. El referente de la aduana chilena mencionó que muchos de sus compatriotas viajan por tierra hasta Argentina para luego volver a ingresar por Osorno y Punta Arenas, debido al elevado costo de los pasajes en avión en el país vecino.