La imprescindible vuelta a clases
El Dr. Omar Tabacco, presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría, habló con Tiempo FM sobre la necesidad de entender a la educación como “esencial para los niños y el futuro”. Lamentó la marcada brecha social que ha generado esta pandemia en materia educativa e hizo hincapié en la “necesidad de volver cuanto antes a la escuela de forma presencial”. La pobreza infantil, el número que preocupa a los profesionales.
“La vuelta a las escuelas en la modalidad presencial es imprescindible”. Así lo han manifestado desde la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), aclarando que cada establecimiento debería adaptar su nivel de reapertura de acuerdo a la realidad epidemiológica local. Para hacer frente a estas desigualdades y problemáticas sociales, desde la SAP consideran que es necesario que las autoridades asignen recursos y diseñen estrategias dirigidas a garantizar un acceso equitativo a la educación para todos los niños, niñas y adolescentes del país.
En diálogo con Tiempo FM, el Dr. Omar Tabacco, presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría, remarcó que “evidentemente tenemos un problema generalizado que no solo tiene que ver con lo educativo, que de por sí es algo muy serio. Hay niños que han perdido todo el año lectivo, lo que se ha manifestado en una brecha social muy importante”, y avanzó con preocupación: “La educación también es esencial para el niño y el futuro del país, y es algo que tenemos que gravarnos a fuego”. Esto no solo desde lo estrictamente pedagógico, ya que, según Tabacco, “la escuela le reordena la vida a los niños y la familia. Hoy están muy desordenados en el descanso, en la alimentación, no han hecho actividad física, no han tenido contacto con sus pares, o sea, han sufrido una serie de agresiones en su vida cotidiana que trasciende aún más la esfera educativa, lo cual nos tiene muy preocupados”.
En otro tramo de la nota, también llamó la atención sobre lo que los profesionales han denominado “epidemias ocultas”, y refiere a que actualmente “hay chicos mal controlados porque no se están haciendo los controles de salud como corresponde, esto en todas las edades, chicos que no están bien vacunados con un 40% de esquemas incompletos, chicos con muchos problemas emocionales, y los adolescentes con temas muy particulares de su edad”, y detalló: “Estar todo el día sin hacer nada, sin horarios, sin tener organización, este tiempo libre, además de deprimirlo, aumenta el riesgo de consumo de sustancias problemáticas, tampoco se está trabajando en el embarazo no deseado, y un montón de factores de salud”.
Consultado sobre si la generación de niños y adolescentes directamente impactada por el Coronavirus, será marcada por la pandemia, Tabacco analizó: “Esperamos poder revertirlo, por eso desde la SAP estamos llamando a la reflexión y a la acción de las autoridades sanitarias y educativas para ponernos a trabajar y ya lograr que en marzo 2021 podamos iniciar un año con educación presencial” y comentó que se ha elaborado un documento “para que los chicos puedan volver al colegio”, y dijo: “Están las condiciones previstas pero hay que ponerse a trabajar ya, no podemos esperar hasta febrero o marzo del año que viene. Entendemos que llega el momento de poner a los niños primeros a la agenda de necesidades. Necesitan volver cuanto antes a la escuela de forma presencial”.
Pobreza infantil
Cerrando el mes de septiembre, el INDEC informó que la pobreza infantil ascendió en el primer semestre de 2020 a 56,3%. Por otra parte, la indigencia en los menores llegó en este período al 15,6%. Se trata del rango etario más afectado de acuerdo con este indicador. Ambos indicadores crecieron respecto de 2019.
Consulado por estos números, Tabacco expresó: “Lo vivimos con gran preocupación, estas cifras son tremendas, pero estamos seguros que el año que viene, desde el punto de vista socioeconómico, puede profundizarse” y continuó: “Vamos a tener que prepararnos para nuevos escenarios en el 2021, escenarios con más profundización de estas brechas económicas y de las consecuencias de la pobreza. La preocupación pasa por la seguridad alimentaria, de hecho, muchos chicos su única comida del día la consumían en el colegio, algo que hoy se ha perdido, lo han dejado de hacer. Estamos conviviendo con las dos consecuencias más importantes de la pobreza: la malnutrición y el sobrepeso y obesidad”.
Por último dijo que, si bien “se trabajan políticas, con las autoridades de los Ministerios de Salud y Desarrollo venimos conversando y charlando, después hay que llevar las ideas a la ejecución y no sé si realmente estamos con todo lo que realmente se necesita el momento, pero sí las autoridades están sensibilizadas en este tema y nosotros vamos a acompañar”.