Río Gallegos| No los salvó la esencialidad
Librerías y papeleras dedicadas a la venta de útiles escolares van cerrando un año para el olvido. La no asistencia en las aulas por parte de alumnos y docentes ha derivado en una caída de casi el 50% en las ventas y hoy pueden sobrevivir gracias a rubros similares. Hoy, ante la falta de certezas sobre el ciclo 2021, dudan sobre si renovar temporada y volver a invertir, o sostenerse con lo que este año no se ha podido vender.
El hecho de que el ciclo escolar, que inicia todos los años en el mes de marzo, durante este 2020 opere de manera virtual, televisiva y radial (estos últimos mediante programas impulsados por el Ministerio de Educación de la Nación), implicó un menor consumo de material escolar, calzado y uniformes escolares, generando una caída en la recaudación dura para el sector. Ante esta situación que viven desde el inicio de la pandemia, a pesar de ser esenciales, la mayor parte del comercio, principalmente papelerías y aquellos destinados a insumos de educación, implementaron promociones especiales y ofertas para incentivar la compra de útiles y materiales escolares, con especial énfasis en la utilización hogareña. Estos espacios, además de artículos de papelería, ofrecen libros, mochilas, regalos y útiles escolares, pero con los estudiantes en la virtualidad la demanda de artículos escolares se ha caído al piso. Según datos oficiales de CAME, solo en el mes de octubre, las librerías tuvieron una baja del 24,9%, afectados por la “no asistencia a las escuelas” en la venta de artículos vinculados a libros y útiles escolares.
Claro está que en nuestra ciudad la situación no es diferente. Las librerías han bajado, según lo consultado por TiempoSur a algunos referentes del rubro, entre un 40% y un 50%, específicamente en útiles escolares, mientras que han logrado mantener ventas en papelería y aumentado en elementos de artística en un 10% o 15%.
Justamente en diálogo con nuestro medio, Nicolás, de El Mayoral, comentó: “Estamos más o menos entre un 40% y un 50% menos en facturación”, al explicar que en “esta clase de comercios como el nuestro, tenemos cuatro rubros, entre lo escolar, la artística, regalaría y embalaje o papelería, pero el rubro escolar es el 40% de las ventas y este año no se vendió nada prácticamente. El rubro artístico ha crecido, materiales pedagógicos que tienen que ver con el entretenimiento hogareño”.
En cuanto al stock que han tenido que retener a raíz de la poca venta, dijo: “Hay cosas que pueden rendir para el próximo año, la mayoría de las cosas son vendibles, lo único que puede entrar en discusión son las licencias que se discontinúan, pero hay cosas que vuelven”.
Por otro lado, tambien en diálogo con TiempoSur, Nicolás, de Todo Papel, también comercio de la capital santacruceña, mencionó que fue el rubro papelería el que pudo sostener el mal año que han tenido en lo que refiere a útiles escolares. “Nosotros pudimos trabajar un poco como proveedores del Estado, con insumos para la administración pública, pero lo escolar fue un desastre” y repasó: “Los primeros 15 días de marzo fueron con mucha gente, incluso esperando afuera, pero se decretó la cuarentena y quedamos con un montón de mercadería de la temporada, habíamos tomado una persona más para afrontar lo que se venía y lamentablemente pasó esto”.
La situación en otros locales es similar y apuestan a poder regularizar su situación a raíz de lo que esperan sea un ciclo lectivo 2021 normal. Aunque esto está aún sin definiciones.