Brownie: cuáles son los errores más habituales que se cometen al cocinarlo

El brownie es un típico postre dulce, cuyo origen se remonta en Estados Unidos, a finales del siglo XIX. Aunque el original es de chocolate, también puede llevar nueces, avellanas, o helado encima, entre múltiples opciones de disfrutarlo. Es una opción fácil y rápida de cocinar, pero hay una serie de errores que se pueden cometer.

1. Elegir cualquier receta de brownie

Es fundamental seleccionar una receta que contenga todos los ingredientes propios del postre: chocolate negro, manteca, huevos, harina, azúcar, esencia de vainilla y bicarbonato. La mantequilla se debe mezclar de manera deliciosa junto con el azúcar. Intentá buscar a conciencia e ir más allá de la primera opción que aparezca en Internet. Trata de localizar aquella receta que contenga todos los ingredientes.

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2. Seleccionar cualquier chocolate

Es necesario usar uno de excelente calidad con una cantidad de chocolate igual o superior al 72%. Además, es aconsejable no emplear cacao en polvo como si se tratara de harina. Las llamadas “lágrimas de chocolate” no funden adecuadamente y pueden convertir la textura en algo incómodo para el consumo.

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3. Mucho cuidado con los cambios bruscos de temperatura

Resulta imprescindible fundir el chocolate de manera adecuada, suave y progresiva. Las prisas en la cocina nunca tienen el efecto adecuado. Respecto al resto de ingredientes principales, se deberán encontrar a temperatura ambiente para conseguir una fusión increíble. Las temperaturas en la mayoría de ocasiones y especialmente, en repostería, juegan un papel fundamental. Al igual que sucede con las medidas.

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4. Comerlo mientras está caliente o templado

Este postre se asienta según se enfría, su sabor se potencia con el reposo. Por eso es muy importante la paciencia y no comerlo apenas es retirado del horno. Además, podría caer mal al estómago ingerirlo mientras está caliente. Valdrá la pena esperar.