Consecuencias de la nevada: menos corderos, rescates e impacto económico

Desde mediados de junio, la Patagonia vivió una de las nevadas más intensas en las últimas décadas, a lo que se le terminaron sumando temperaturas extremas de frío, llegando incluso hasta los -20 grados en algunas zonas. En el campo, la situación se vivió de manera diferente al resto de las ciudades. El azote del invierno golpeó a las familias y trabajadores que viven en estancias y parajes, que en algunos casos quedaron aislados y tuvieron que ser asistidos por el Ejército. Se agrava con las pérdidas millonarias que se consideran producto de la muerte del ganado.

Con este panorama estuvo presente en los estudios de Tiempo FM Javier Vera, productor santacruceño, que contó cómo se vivió esta cruda temporada. El entrevistado, que viene de familia campera, indicó que hay un cambio generacional en los campos, hoy afectados y bajo nieve.

Haciendo alusión a uno de los últimos operativos de rescate, indicó que “cuando llevamos al paraje Tapi Aike intentamos entrar y nos dimos cuenta que el panorama es bastante peor de lo que nos contaron. Estamos hablando de la Patagonia, si la nieve tiene esas alturas, el pasto queda abajo”, dijo en diálogo con el programa La parada, que se emite en Tiempo FM 97.5.

“Llegamos ese día a las 3 de la tarde y había -21 grados, las motos se escarchaban todo, entonces parecía que andábamos en gasolero. En este establecimiento ganadero, no se abrió el camino. Desde un principio fuimos acompañados por el Ejército, que están en Rospentek”, explicó. Las máquinas como tanques sirvieron para el despeje de la nieve y poder marcar una ruta para transitar.

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“Detectamos donde estaban los grupos de ovejas, están por todos lados, en parte tapadas con la nieve”, dijo el entrevistado, dando un panorama de lo que iban encontrando.

En este punto, lamentó que se haya tenido problemas con combustibles, algo que complicó la situación.

En este punto de la entrevista, agradeció lo realizado por el Ejército, poniendo en valor los trabajos que llevaron adelante. “Lo mejor que encontramos fue la camaradería.  vamos a participar en agradecimiento al esfuerzo que hicieron. No importa si la plata viene de nación o provincia,había que poner el pecho. Son pibes que son voluntarios, que empiezan a subir de jerarquía”.

En la cuestión económica y en el proceso de lo que viene, se le consultó acerca de cómo afectará esto a la producción, remarcando que los precios que se colocan en las piezas de cordero -con la vista puesta en fin de año- son determinados por el mercado.

“Mensualmente te llega como van cambiando los sueldos de los empleados. Producir el número en este momento es muy finito.  Este año va  a haber muchísimos menos corderos. Esto es muy parecido a lo que pasó en el 95”, advirtió.