DNU de Milei

Daniel Sabsay: “El DNU es una barbaridad porque impide la deliberación”

Así lo sostuvo el abogado constitucionalista, quien hizo mención al Decreto de Necesidad y Urgencia de Javier Milei publicado en el Boletín Oficial, y el cual estará vigente desde el próximo 29 de diciembre.

  • 26/12/2023 • 11:14

Días atrás, en un mensaje grabado transmitido por cadena nacional, el nuevo mandatario argentino anunció la firma de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que incluye más de 300 medidas para desregular la economía. El mismo fue publicado el pasado jueves en el Boletín Oficial y entrará en vigencia el próximo 29 de diciembre.

En este contexto, el abogado constitucionalista Daniel Sabsay, dialogó con El Mediador, programa que se emite por Tiempo FM 97.5, y expresó: “Los Decretos de Necesidad y Urgencia son decretos de contenido legislativo. La reforma de 1994 los incorpora a la Constitución, pero con el deseo de limitar al máximo su utilización”.

Asimismo, sostuvo: “Venimos de los diez años de Menem, que había dictado 500 Decretos de Necesidad y Urgencia. Como principio general, establece que el presidente no puede dictar DNU, salvo cuando circunstancias excepcionales impidieran el trámite normal de sanción de leyes. Excluye cuatro materias: penal, fiscal, partidos políticos y electoral”.

“Las circunstancias excepcionales se producen en una situación bélica, si hay un terremoto u otra catástrofe natural. O si hay una situación de tal emergencia económica que exige de parte del Ejecutivo la toma de una decisión rápida, que luego debe ser aprobada o rechazada por el Congreso”, señaló el letrado.

Por último, aclaró: “En el marco del DNU de Milei no entra en ninguna de esas características. Se han introducido reformas al Código Aduanero que es un tema fiscal, una materia excluida. Y, además, tiene un formato que no tiene antecedentes en la historia de Argentina: una especie de ómnibus, con 366 iniciativas diferentes que implican leyes, tratados y normas que buscan ser tratados en bloque. Es imposible o es una barbaridad, porque impide la deliberación. Es fundamental lo previo, la discusión. Acá todo eso se quiebra, queda pintado el legislativo”.