"Muertos"

El amenazante mensaje de un diputado de LLA a empleados del Banco Central

Mientras los trabajadores del Banco Central salieron a defender sus puestos de trabajo, desde el entorno de Javier Milei no dudaron en lanzarles una nada velada amenaza de muerte.

  • 16/11/2023 • 16:19

A días del balotaje entre Sergio Massa Javier Milei, los trabajadores del Banco Central de la República Argentina y de otras entidades del sistema financiero argentino, junto al sindicato La Bancaria realizaron este jueves un abrazo simbólico al sede de la autoridad monetaria contra el cierre que prometió en campaña el candidato de La Libertad Avanza (LLA).

Sin embargo, mientras los trabajadores se expresaban en las calles, el diputado electo por la provincia de Buenos Aires por LLA, Agustín Romo, dejó una nueva muestra de la violencia de este sector político y los amenazó de muerte. A las imágenes de la protesta Romo sumó emojis de calaveras y tibias y de ataúdes.

A pesar de las amenazas de La Libertad Avanza, la Comisión Gremial Interna del BCRA convocó a esta movilización con el apoyo de La Bancaria, el sindicato que conduce Sergio Palazzo, bajo el lema "Yo defiendo al Banco Central" y difundieron un documento en el que señalan que, "basado en el desconocimiento generalizado de las funciones del Banco Central y nuestro rol para la comunidad, las y los trabajadores del BCRA somos señalados como enemigos públicos y nuestra Institución como la culpable de todos los males, llegando a plantearse en medio de una campaña presidencial dinamitar, eliminar y cerrar el Banco Central"

Así indicaron que "el candidato de La Libertad Avanza (LLA) plantea un mundo ideal que solo existe en sus libros de texto, libros que ni siquiera son el consenso mayoritario de la profesión sino los de una escuela marginal que postula cosas que no se han aplicado en ningún país del mundo de la manera extrema en la que se propone".

Y advirtieron que la "idealización" de Milei es producto de una simplificación de la realidad armada sobre supuestos totalmente irreales y una confianza ciega en los mercados y la posibilidad de las personas para arreglárselas individualmente. Califican esa idea como "un sueño económico que nunca ha sido realidad, excepto para la élite más pudiente". Y alertan respecto de que esas posturas implican "un abismal retroceso en la gestión de las economías modernas".