La cuarentena administrada, la extensión del aislamiento y el pico de casos, según una infectóloga

Será difícil controlar que la ciudadanía cumpla con las salidas de esparcimiento diarias de una hora, aunque cada provincia y localidad tiene su propia realidad epidemiológica.

La Dra. Leda Guzzi, médica infectóloga, opina sobre esto, pero también sobre la inmunidad del virus, si los niños son los portadores y si hacen falta más testeos en Argentina, a pesar de que se han incrementado considerablemente

-TS: Muchas provincias -como aquí en Santa Cruz- comenzarán a aplicar la “cuarentena administrada", es decir, más rubros habilitados y salidas a 500 metros. En su opinión, y según la realidad de cada localidad, ¿es posible controlarlo y salir solo 500 metros y una hora?

LG: Creo que en la práctica es difícil que la gente lo cumpla estrictamente y es difícil controlarlo también. Creo igualmente que las realidades de las provincias son distintas, especialmente en número de casos y también en el R0 que es la tasa de transmisibilidad (es decir a cuántas personas contagia cada infectado). Cuando el R0 es menor a 1 y especialmente si la zona no es tan densa demográficamente hablando, puede ir flexibilizándose la cuarentena, pero sin dejar de monitorear la evolución, pudiendo eventualmente volver atrás.

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-Especialistas han advertido que mientras más tiempo se extienda el aislamiento, más tarde llegará el pico de casos (lo que a su vez complicará la actividad comercial en general)

La cuarentena con el aislamiento que conlleva, es la medida más efectiva para contener la pandemia y evitar la transmisión. Entonces es posible que el pico de la enfermedad se vaya adelantando progresivamente o que haya una meseta con varios pequeños picos... Y si bien comprendo que la actividad económica debe ir reactivándose lentamente, no debe ser a expensas de poner en riesgo la salud de la población... En mi opinión, la ciudadanía fue creciendo progresivamente en la adherencia y cumplimiento de las medidas de prevención (aprendimos de la importancia del distanciamiento de más de 1.5 metros entre nosotros, del lavado de manos frecuente, del todo y estornudar en el pliegue del codo, e incluso de la necesidad del tapabocas en situaciones de confinamiento) y eso tendrá un efecto protector para cuando las medidas se vayan flexibilizando.

-Se habla de extender el aislamiento hasta después del invierno. Su opinión.

Mi opinión, aún a riesgo de ser antipática, es que cuanto más pueda extenderse la cuarentena mejor va a ser... Por supuesto, las dimensiones que componen una sociedad en toda su integridad, son importantes y lo económico es clave también. En la actualidad, hay un desafío en términos de creatividad y reestructuración de la actividad comercial para poder ofrecerla sin que esto implique un riesgo para la salud pública. Entiendo también, que hay actividades de cuentapropistas por ejemplo, que si no salen a la calle, no comen y ahí es donde tenemos que reforzar las medidas de prevención, porque sin duda pasar hambre también conlleva riesgos para la salud física y psicosocial... Por lo tanto hay que encontrar un equilibrio.

-A ciencia cierta, ¿qué se sabe de las personas que ya contrajeron el virus? Es decir, ¿pueden volver a contagiarse más allá de haber logrado inmunidad?

No sé sabe. Se desconoce si los anticuerpos neutralizantes protegen de una segunda infección, en tal caso cuánto duran y también desconocemos si todos tenemos la capacidad de desarrollar las mismas defensas.

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-Abrir las escuelas será lo último que realice Nación y así sucede en muchos países, pero se advierte que los niños pueden ser portadores y provocar un alto índice de muertes. Esto, ¿está claro o se estudia aún?

No. Los niños son una población que cursa la enfermedad en forma leve, con algunas pocas excepciones reportadas en la bibliografía indexada. Sí creemos que pueden ser portadores del virus en su faringe y funcionar como vehículos muy eficaces de transmisión al resto de la familia. Hay algunos reportes que indicarían que son los adultos los que transmiten a los niños, sin embargo, es difícil sacar esas conclusiones ya que los niños están encerrados desde el inicio de las cuarentenas y parece un poco aventurado aseverar eso con tanta certeza.

-¿Deben existir más testeos?

Se incrementó mucho el testeo, incluso a más de 1400 test por millón de habitantes. Tenemos una tasa de positividad de casi 9%, que es un índice muy bueno según la OMS (si este índice es mayor a 20% indica que se está testeando poco o muy poco). Tenemos además 2 marcadores subrogantes de que no se nos están escapando pacientes que son la baja ocupación de pacientes en terapia intensiva por COVID y la mortalidad por neumonía grave, que tampoco está aumentando. En definitiva, son indicadores de que tenemos una muy buena estrategia de testeo.

* Dra. Leda Guzzi. Médica Infectóloga, MN 108630 - Miembro de la Sociedad Argentina de Infectología. Infectóloga de la Clínica Olivos SMG y del Hospital Maternidad Santa Rosa de Vicente López.