INTA-Encuesta

La depredación, problemas climáticos y abigeato, como principales causas de mortalidad en ovinos

Según una encuesta realizada por el INTA Santa Cruz, un 96,4 % de los productores reportó haber sufrido pérdidas de ovinos debido al zorro colorado, y el 77 %, debido al puma. Las estadísticas fueron publicadas en el trabajo “Percepción sobre el impacto de la depredación y el desempeño de métodos para su mitigación en sistemas ganaderos de Santa Cruz”.

  • 15/01/2024 • 12:00

Los productores de la provincia de Santa Cruz consideran que la depredación, los problemas climáticos adversos y el abigeato, son las causas principales de mortalidad en ovinos. Al asignar un orden de importancia, indicaron que la mayor pérdida se atribuye a la depredación por zorro colorado, seguida por la ocasionada por el puma. Según una encuesta realizada por el INTA Santa Cruz, el 77 % de los productores reportó haber sufrido pérdidas debido al puma, y un 96,4 % debido al zorro colorado.

Las estadísticas fueron publicadas en el trabajo “Percepción sobre el impacto de la depredación y el desempeño de métodos para su mitigación en sistemas ganaderos de Santa Cruz”, presentado por el INTA-EEA Santa Cruz. El trabajo surgió a partir de la preocupación expresada por los ganaderos, quienes manifestaron su inquietud y los desafíos que enfrentan en relación con esta problemática. Los investigadores abordaron su impacto directo en las explotaciones ganaderas y apuntan a evaluar el rendimiento de diversos métodos de mitigación.

Uno de los autores del trabajo, el Ingeniero en Recursos Naturales Renovables Manuel Gil (AER-INTA Río Gallegos) comentó que “los resultados obtenidos en este informe son fundamentales en nuestra estrategia para abordar los crecientes desafíos que enfrenta el sector ganadero ovino en Santa Cruz. Particularmente en lo que respecta a depredación, que se ha convertido en una preocupación mayor en los últimos años. Además, está claro que las pérdidas de ovinos por depredadores se suman a otras adversidades como condiciones climáticas extremas y el abigeato, reduciendo significativamente la rentabilidad de la actividad”.

 

Gil destacó que “el propósito principal del informe es establecer una base sólida de información sobre cómo los productores perciben a los depredadores. Esto es crucial, ya que influye directamente en cómo los mismos manejan y responden a la depredación. Con este conocimiento podremos elegir, de manera más informada, los sitios de muestreo para estudiar la abundancia y distribución de los depredadores. Esto es necesario para entender mejor la dinámica entre la ganadería ovina y los depredadores en la región”.

Los resultados de la encuesta

La encuesta revela que más del 50 % de los productores de ganado ovino llevan un registro de las causas de muerte de sus ovejas. Las principales causas identificadas son los ataques por zorro colorado y puma, problemas climáticos adversos y el abigeato. Esta tendencia refleja los desafíos constantes en la ganadería ovina de Santa Cruz, especialmente, el impacto de los carnívoros corroborados por investigaciones anteriores. En áreas cercanas a centros urbanos, los perros asilvestrados también se identifican como una amenaza.

El 77 % de los productores manifestó experimentar pérdidas de ovinos debido a la depredación por puma, principalmente, durante las etapas de servicio-esquila y señalada-destete. Las categorías más afectadas fueron ovejas y, en segundo lugar, borregos/as. Notablemente, el 90,6 % de los productores afectados implementaron medidas preventivas contra el puma. Mientras que aquellos que no lo hicieron mencionaron restricciones presupuestarias o la decisión de abandonar la producción ovina, como razones para no tomar medidas preventivas.


El 96,4 % de los productores encuestados reportó haber sufrido pérdidas de ovinos debido al zorro colorado. Estas pérdidas se produjeron, principalmente, durante la etapa de señalada-destete. Las categorías de corderos/as fue la más afectadas por esta especie. 

El 20 % de los ganaderos consultados informó haber sufrido pérdidas de ovinos debido a los perros. Estas pérdidas ocurrieron, principalmente, durante la etapa de servicio-esquila, seguidas por la etapa de señalada-destete y destete-servicio. Las categorías de ovejas y, en segundo lugar corderos/as, resultaron ser las más afectadas por dichos depredadores, aunque todas las categorías presentaron afectación.
Cabe destacar que los productores que informaron pérdidas de ovinos por perros se encuentran asociados a zonas cercanas a las ciudades.

El 35 % de los encuestados realizaron prácticas de reducción de pérdidas y no fueron efectivas. Utilizaron collares, jaulas, trampas, encierre, cacería, pero todo conlleva consecuencias económicas y ecológicas, además de no mejorar la producción.

 

Por otro lado, el 34% de los productores utilizan perros protectores de ganado, con un promedio de 4 perros por establecimiento. El 95 % han observado una reducción en las pérdidas de ovinos desde la integración de estos perros a su manejo.

El trabajo destaca que los participantes en el relevamiento proponen diversas alternativas para mitigar las pérdidas, destacando la ocupación de campos vecinos mediante arrendamiento o acuerdos colaborativos. Sugieren un trabajo conjunto entre productores para monitorear los daños y evaluar la eficacia de las medidas. El enfoque colaborativo se ve como una manera integral de abordar la depredación, reconociendo que es un desafío que requiere esfuerzos colectivos. Proponen la reinstauración del pago de cueros por la provincia y compensaciones de minería y petroleras a productores vecinos, considerándolos como reservas ecológicas. Sin embargo, se destaca la presión de carnívoros en campos abandonados y la ineficacia a largo plazo, del sistema de recompensas por la caza. El 87 % de los productores estaría dispuesto a aplicar prácticas adicionales si son efectivas, destacando la importancia de un registro actualizado de depredación para la toma de decisiones de manejo.

 

Gil comentó que el informe “forma parte de un proyecto más amplio que busca responde a las necesidades específicas del sector ganadero”. En este sentido, comentó que “uno de los objetivos es generar un mapa de zonificación que identifique áreas de intervención prioritaria, que será una herramienta valiosa para guiar los esfuerzos de manejo y mitigación. Permitiendo a los productores y a las autoridades locales, enfocar recursos donde más se necesiten”.

El investigador relató que “el proyecto tiene como meta evaluar objetivamente métodos actuales de control de depredación. Queremos ofrecer a los productores y a los responsables de la toma de decisiones información basada en evidencia, esto es fundamental para que los métodos utilizados sean sostenibles y responsables”.
“Buscamos cuantificar el impacto real de los depredadores sobre la ganadería ovina en la provincia, clave para fundamentar decisiones de manejo a nivel predial y provincial. Entender el alcance del problema nos permitirá desarrollar respuestas más efectivas y adaptadas a las necesidades locales, mejorando así la rentabilidad y sostenibilidad de la ganadería ovina en Santa Cruz”, comentó.