Desafíos tras lo que será la salida de Arbumasa del puerto deseadense

La semana pasada, con el objetivo llevar claridad a los trabajadores portuarios de la localidad deseadense, a raíz de la información sobre la venta de la planta del Grupo Arbumasa, y a los fines de ordenar el funcionamiento en la terminal portuaria, autoridades del gobierno provincial y municipal se reunieron con el sector para dialogar sobre la actualidad y los nuevos desafíos.

En principio la prioridad en la agenda fue destrabar el problema suscitado en la localidad, para evitar que continúen entrando al puerto barcos poteros con carga remanente en sus bodegas, sin que se descargue la totalidad de la materia prima debido a la negativa de los estibadores. Situación que, según el propio intendente de la localidad, confirmó a TiempoSur, ha sido subsanada.

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Ya respecto al a venta de Arbumasa, es necesario remarcar que se trata de una de las primeras en instalarse en la localidad, por lo que su salida generará un gran impacto en la comunidad. Si bien la concreción de la venta es un negocio entre terceros, las autoridades manifestaron que a la empresa que adquiera la planta pesquera “se le pondrán las mismas condiciones que a todas las empresas con presencia en la provincia, que se mantengan las fuentes laborales y que se las incrementen, al igual que la actividad en los puertos”. Actualmente Arbumasa cuenta con 80 operarios y entre seis y siete barcos en el puerto deseadense.

Raúl Pirri Martinez, intendente de Puerto Deseado, remarcó, en dialogo con TiempoSur, que “la salida de Arbumasa es un hecho, está prácticamente en un 95% concretada la venta de la empresa”, y continuó: “Será un golpe duro para el puerto. Tenía muchos barcos, sobre todo en el langostino, que descargaban en nuestro puerto. La empresa que llegaría no tiene esta modalidad e ingresará la materia prima por camiones, por lo que se perderá trabajo en el puerto, pero se generará mayor mano de obra en las plantas pesqueras. Se le dará un valor a agregado a los productos que ingresen a la planta”.

Ante este contexto, Martínez aseguró que “el desafío que tenemos por delante, tanto para provincia, como para el municipio, es compensar esta pérdida de buques con otras empresas y otras alternativas. A la empresa que compra, en principio, pedimos que los barcos descarguen en nuestro puerto. Como ellos tiene una característica de flota que no son congeladores a bordo, sino que son barcos fresqueros, por ahí ingresaran en Caleta Olivia en principio, pero nosotros llevamos gestiones adelante para tratar que ingresen en Puerto Deseado, se contrate gente de la localidad, que se mantenga la fuente laboral de la empresa que vende, bajo el mismo régimen que trabajan hoy, que no se pierdan condiciones laborales”.

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Respecto a la temporada portuaria, Martínez comentó que “este año tenemos una muy buena temporada de calamar con 40 mil toneladas, si bien aún son números que no son definitivos, la temporada está siendo muy buena. Estamos pensando también en que sea una buena temporada de langostino”.  En este sentido, según la información oficial brindada por la Secretaría de Pesca del Gobierno Nacional, los resultados de acumulación del volumen de descargas de productos pesqueros se incrementaron en un 54 % con respecto al mismo período en 2023.

Por último, se refirió al nuevo reglamento que regirá la actividad, que busca ordenar las tareas que se realizan allí, evitando el mal manejo interno del puerto e incentivando el respeto y el compromiso por parte de los trabajadores para que no se sigan perdiendo barcos. “Acompañamos al gobierno provincial en este proceso, para nosotros es muy bueno porque le da tranquilidad y garantía a las empresas sobre todo en paz social”, señalo el jefe comunal.