Recomiendan chequear artefactos y ventilar los ambientes

El profesional de la empresa provincial hizo referencia al “enemigo silencioso e invisible, que no posee olor ni color”. Contó que se está trabajando en una campaña informativa que incluyó la distribución de cuadernillos hace unos meses mediante el Consejo Provincial de Educación.

“La mala combustión se puede dar en todos los domicilios que tienen la gracia de poseer gas natural. Podemos distinguirla en una llama amarilla o en la mancha negra de hollín en las paredes alrededor de los calefactores”. Por ello, recomendó chequear los artefactos y ventilar los ambientes cada dos horas como mínimo; y así contrarrestar la posibilidad de daños graves. Se trata de “invertir en nuestra seguridad, prevenir antes que lamentar”, dijo Maggioni.

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El profesional hizo hincapié en tener un gasista matriculado de cabecera. “Hay un listado de profesionales en nuestra página web”; e informó los síntomas más comunes que presenta una persona intoxicada con monóxido.

“El gas tiene efectos nocivos si uno lo inhala en grandes cantidades y puede generar malestar, dolor de cabeza, nauseas, vómitos, vértigos, mareos, falta de fuerza en los músculos y pérdidas de conciencia, hasta pudiendo llegar a la muerte”.

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Dijo que al detectar personas inconscientes se las debe retirar del ambiente y llamar a urgencias. Luego convocar a la empresa proveedora del servicio y hacer el reclamo.

Además destacó que además de cuidar la salud, el chequeo de artefactos puede impactar positivamente en la economía del hogar al controlarse el consumo; y se mostró orgulloso de que Distrigas forme parte del Estado Provincial, que trabaja para llevar la red de gas natural a sectores que no cuentan con este servicio esencial tanto en Río Gallegos como en localidades del interior de Santa Cruz.