Santa Cruz busca modificar la Ley de Pesca y la infraestructura portuaria

Sobre la intención de actualizar la Ley Provincial de Pesca N.º 1464, la cual, según explicó, “ya tiene varios años y se ha modificado con decretos reglamentarios, necesita actualización”. La iniciativa, impulsada por el ministro de Producción, Gustavo Martínez, busca que “en la localidad se empiece a trabajar por sectores y se escuchen propuestas sobre lo que habría que actualizar o modificar”.

Aberastain subrayó que el objetivo es “escuchar al sector, abrir el juego y consensuar los cambios para hacer modificaciones que realmente sean positivas”. Como primer paso, realizaron un taller con investigadores, empresas, diputados y concejales. “Fue una mesa amplia e interesante y un primer ejercicio de trabajo técnico grupal”, señaló.

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“Necesitamos que las empresas se comprometan para que esta Cuenca y esta ciudad, sigan pujantes”, dijo Othar

Respecto a los cambios urgentes, Aberastain mencionó la importancia de las negociaciones en el Consejo Federal Pesquero, dado que la política pesquera nacional afecta directamente a Santa Cruz. “Hoy estamos dando la batalla de conseguir un apoyo social de merluza mucho mayor”, afirmó. Actualmente, la provincia cuenta con una cuota social de 5.500 toneladas y aspira a aumentarla a 30.000. Con esta ampliación, podrían exigir que las empresas descarguen en Puerto Santa Cruz y procesen en las plantas locales para generar empleo.

Al referirse a los conflictos salariales en los puertos, aclaró que “hay conflictos sectoriales en algún puerto, pero en Puerto Deseado no”. Aunque se plantearon propuestas como un consejo asesor portuario para dialogar temas locales, consideró que “sería irresponsable” abordar los temas laborales sin la presencia del Ministerio de Trabajo.

En cuanto a la infraestructura portuaria, detalló que el programa “Puerto Sur” busca mejorar las condiciones edilicias y operativas de los puertos. “En Puerto Deseado no se ha recibido inversión en los últimos 20 años”, apuntó. Aunque se licitaron obras con créditos internacionales, problemas como la inflación y el desfasaje de precios dejaron varios proyectos en espera.