Todos con San Juan Bosco

Cada 16 de agosto se conmemora el nacimiento de Don Bosco, patrono de Santa Cruz y de la Patagonia. En este marco festivo, durante la semana se realizaron actividades para homenajearlo y resaltar su obra, ligada por la promoción y desenvolvimiento de la juventud. En Río Gallegos el buen clima acompañó las actividades, ya que parte de ella se realizó al aire libre. 

A las 18 horas de ayer partió la procesión de fieles desde la Capilla Virgen Niña, quienes caminaron repitiendo oraciones y en conmemoración del patrono, hacia la Parroquia San Juan Bosco. Allí se ofició la misa, brindada por el Mons. Obispo Ignacio Medina. En todo momento, la figura del santo patrono acompañó a los presentes.  

Asimismo, se hizo la presentación del Padre Ariel, que se hace cargo de la comunidad de Don Bosco. A la hora de tomar la palabra y hablar a los presentes, el Obispo utilizó y la llegada del mes de las infancias de este domingo, para referir un mensaje sobre la importancia de la inocencia, la bondad y la necesidad de rescatar valores de la niñez en la vida adulta. 

 “La Iglesia pide que acepte su vida en estas cosas que vamos a ir entrenando para el bien de la comunidad. La invitación a ser como niños es un reto nos empuja ser simples, tener sensibilidad para ayudar a otros, cuando se encuentra en necesidad y tener un corazón inocente”, dijo Ignacio Medina. “Son muchas características que nos puede costar hacer parte de nuestra vida, pero vienen acompañada de la promesa del cielo y por esto vale la pena esforzarse, para transportar en pequeños que aceptan a dios como alguien que los protege. Y es necesario que Dios nos ceda la gracia para transformar más al corazón y ser como niños”, pidió el Obispo. 

 En este sentido continuó: “No lo podemos todo nosotros solo. Pedimos reconocer cómo actúa en nosotros y qué debemos hacer. También, la comunidad de San Juan Bosco. es un tiempo de cambio. Implica esperanza el cambio por la vida nueva”. “Nos inspira lo bueno y nuevo que solo viene de Dios. Solo basta saber confiar y ser dóciles a su espíritu. No dejan de ser pate de la vida normal y cotidiana de la Iglesia”, reflexionó.  

“Dios nos va hablando y nos va guiando. A la comunidad parroquial le encomiendo al nuevo párroco, el padre Ariel. Hace doble tarea, de la catedral y esta comunidad, en la que está caminando hace varios meses”, presentó.  

Además, pidió que todas las comunidades parroquias cuenten con equipos sacerdotales y sean fieles y alegres servidores. “Debemos seguir rezando mucho y apoyando a aquellos jóvenes que van dejando crecer la escucha, atentos al llamado de Dios y de seguir a Jesús más de cerca”, sostuvo. 

 Sobre la figura de Don Bosco, remarcó que muchos se preguntaron cuando rezaba Don Bosco. “Sería mejor preguntar cuando no rezaba”, señalando que “cuando nos encontremos cansados y agobiados por las tribulaciones, alcemos los ojos al cielo, es una manera de pensar y de actuar, con la actitud de fe que estimula el dinamismo de la esperanza que impulsa la acción. Para eso trabajaba Don Bosco”.