Era monja y abandonó el convento para ser modelo erótica: trabaja cada 15 días y gana 2500 dólares
Yudy Pineda es colombiana, tiene 31 años y reveló una historia que la tuvo ligada a la fe desde los 10. “Al principio me sentía mal, pero ya no: mi empleo es digno y artístico”, reveló.
Yudy Pineda confesó que a veces descree del rumbo que tomó en su vida. La mujer, nacida en Ituango, municipio ubicado en el departamento colombiano de Antioquia, pasó más de ocho años en un convento y decidió abandonar los hábitos para dedicarse a ser modelo erótica.
Cuando era pequeña, su familia decidió mudarse a Urabá, a menos de 100 kilómetros de su lugar de nacimiento. “Estuve en un colegio en el que nos visitaban las monjas. Decidí entrar a los 10 años en esa vocación”, contó Pineda, que actualmente tiene 31.
Permaneció allí hasta los 18 y su huida del convento nada tuvo que ver con el camino que adoptaría más adelante. “Estaba muy contenta”, indicó. Sin embargo, la atracción que sintió por su profesor de catequesis fue más fuerte.
“Hablé con la hermana y le dije que no era correcto lo que estaba haciendo, me había enamorado y decidí salirme del convento”, contó en una entrevista con el medio colombiano Caracol Radio.
Trasladó su vida a Medellín y consiguió trabajo en una multinacional de alimentos y bebidas. Tuvo dos hijos y su realidad se llenó de necesidades. Hasta que un hombre le propuso hacer un casting para un portal web de modelos eróticas, en donde se desnuda frente a cámara. También grabó escenas de sexo para diversos sitios pornográficos.
“Conocí a una de las personas que llevan más de 10 años en la industria, asesorando y profesionalizando a las modelos. Me ha brindado demasiado apoyo”, explicó Pineda.
Respecto a su pasado, manifestó que “al principio me sentía mal, pero ya no. Me siento súper bien cuando voy (a la iglesia). Siento mucha paz, mucha tranquilidad. Cuando entro, trato de ir lo más decente que pueda. Tampoco falto los viernes al grupo de oración, los sábados de vigilia y los domingos a misa”.
Pineda reconoció que el sacerdote de la capilla intentó convencerla para que abandonara su trabajo, a lo que ella se negó. “Mi empleo es digno y artístico. No tiene nada de malo”, remarcó.
Pineda indicó que el sacerdote de la capilla la intentó persuadir para que cambiara de trabajo, pero ella se negó. Para la joven, su empleo es “digno y artístico” y considera que no tiene “nada de malo”.
“Explicárselo a mi hija fue fácil, a mi hijo fue más complicado porque se sorprendió mucho”, continuó Pineda, que detalló que cada 15 días graba unas 40 horas y le pagan más de 2500 dólares.
“A las personas que me critican mucho les digo, no importa a qué me dedico, pero Dios siempre va conmigo, así sea una actriz, una modelo, me esté masturbando, Dios siempre está conmigo”, dijo en una entrevista con el canal de YouTube Yakuza Perú.
Pineda se muestra activa en las redes sociales, principalmente en TikTok e Instagram. También posee una cuenta en la plataforma Unlock, en donde se presenta como “la monjita”. Allí vende 12 fotos y cuatro videos a 10 dólares.(TN)