Chequeo médico anual para el personal de Infantería
En el marco del plan anual interno de la División Guardia Infantería Zona Sur, el personal policial está llevando adelante un programa integral que abarca tanto aspectos operativos como de entrenamiento físico. Este enfoque resalta la necesidad de que los efectivos mantengan una aptitud física óptima y controlada, minimizando el riesgo de lesiones físicas o problemas de salud mental.
Con el objetivo de preservar la salud integral de los efectivos, la División Guardia Infantería ha coordinado con la Dirección General de Bienestar Policial la realización de los chequeos médicos anuales para todo su personal. Estos exámenes son fundamentales para garantizar que cada integrante de la División cuente con la aptitud física y de salud necesaria para el riguroso entrenamiento policial y las exigencias operativas que enfrentan.
Los chequeos médicos fueron realizados en los Policinsultorios y en la Dirección Bienestar Policíal, incluyeron una serie de estudios como electrocardiogramas, radiografías, análisis de sangre completos, y la actualización del calendario de vacunación. Asimismo, cada efectivo es entrevistado por la Dra. Barría, médico policial a cargo, quien se encarga de evaluar y otorgar el apto físico necesario.
La policía busca a Nelson Ariel Romero
Además, este proceso cumple con lo establecido, que exige estos exámenes como requisito indispensable para las Unidades Especiales. De esta manera, los efectivos pueden integrar el Programa de Alto Entrenamiento y Dedicación Operativa para Cuerpos Policiales y Fuerzas Especiales (PAEDO), un plan orientado a maximizar la preparación y el desempeño operativo del personal policial dependiente de la Dirección de Operaciones Policiales, cómo Fuerzas Especiales, Guardia Infantería. Grupo Operaciones Motorizadas.
En este caso la División Guardia Infantería Zona Sur, consciente de la importancia de la autodisciplina y el cuidado integral, refuerza su compromiso con la promoción de la salud y la calidad de vida de sus efectivos, asegurando que tanto en servicio como fuera de él, el personal mantenga los más altos estándares de aptitud física y mental.
Este esfuerzo conjunto entre la División y la Dirección General de Bienestar Policial no solo apunta a preservar la salud de los efectivos, sino que también garantiza una respuesta operativa eficaz, en consonancia con los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la promoción y prevención de la salud.