Empezó el juicio por maltrato a menores contra una pareja

Un caso que conmocionó a Santa Cruz, y en particular a la localidad de Río Gallegos, a fines de 2021 llegó a juicio. Una joven pareja es juzgada por someter a tres pequeños -hijos biológicos del sujeto- a un trato brutal, que incluiría quemaduras, golpes y comer sus propio excremento. Al momento de la acusación ambos tenían 33 años.

El que declaró en el día de ayer fue el padre, quien negó las acusaciones y culpó de esta situación a la madre biológica de los menores: “Nunca les pegué, se daban cintazos entre ellos”, dijo, agregando que como los chicos practicaban deportes se lesionaban de forma constante.

Frente a los jueces Joaquín Cabral, Francisco Marinkovic y Eduardo López el hombre continuó afirmando que nunca les pegó.

El hombre, que al igual que su ahora expareja, afronta una condena de entre 8 y 20 años por lesiones graves calificadas por ensañamiento y alevosía, amenazas y reducción a la servidumbre.

Acusaciones cruzadas

El acusado cargô contra la madre biológica y sobre a la pareja de la mujer por maltrato contra los tres menores, situación que quedó expuesta en cámara Gesell y los exámenes médicos. “Quizás ellos se confundieron”, dijo el imputado en relación con que, previo a la convivencia con él y la otra acusada, los menores habían abandonado la casa de su mamá por haber sufrido violencia por parte del padrastro.

El juicio continuará con la declaración del mayor de los hermanos, que hoy tiene 16 años. Luego será el turno de los testigos.

El caso 

La pesadilla de los menores comenzó a salir a la luz el 14 de diciembre de 2021, cuando los dos hermanos mayores decidieron escapar después de que rompieran accidentalmente una tablet de la madrastra. Temiendo por sus vidas, se dirigieron a la comisaría para pedir ayuda.

Tras recibir la denuncia, el Juzgado de Instrucción N° 1, bajo la supervisión de la jueza Marcela Quintana, ordenó la detención de los acusados. El hombre fue arrestado en ese momento y se le confiscó un teléfono celular. Por su parte, la mujer fue localizada en la obra de la represa Néstor Kirchner, a unos 80 kilómetros de El Calafate, y detenida por la DDI de esa localidad, que también le confiscó su dispositivo móvil.

El hombre fue trasladado a la División Comisaría Segunda, mientras que la mujer fue llevada a la División Comisaría Tercera en Río Gallegos.