Liberaron a la suboficial bajo caución juratoria

Ayer se conoció que la Suboficial de policía que en la tarde del lunes protagonizó una pelea con sus familiares y que luego, se atrincheró en la casa junto a su pareja y dos hijos chicos, logró ser excarcelada bajo caución juratoria, es decir que la mujer, juró cumplir fielmente las condiciones impuestas por el Tribunal que se la otorgó.

El oficio en el cual se le dicta la excarcelación, llegó a la Comisaría Tercera donde se encuentra alojada, y luego de realizar las actas correspondientes, la mujer recuperó su libertad.

Cabe recordar que, todo comenzó cerca de las 16:30 del lunes, en una casa de calle Héctor Ciselli al 900 donde había problemas familiares.

En el lugar se hizo presente personal del 101 y de la Comisaría Sexta, quienes se encontraron con una mujer que estaba en la puerta de la casa y con una herida cortante en una de sus manos, por lo que la llevaron a la dependencia y allí recibió las curaciones del caso.

Según pudo conocer TiempoSur, la mujer habría manifestado que, en la casa se encontraba su hijo, su hija -que es policía- y el yerno. Los tres habrían estado ingiriendo bebidas alcohólicas y, al acabárseles, llamaron a la mujer para que les llevara más bebida.

La mujer fue y les reclamó que estuvieran bebiendo delante de los nenes, por lo que comenzaron a discutir y en un momento dado, los dos hombres comenzaron a pelear, la mujer se metió y terminó con un corte en la mano, por lo que se retiró del domicilio junto a su hijo y llamó a la policía.

Con el correr del tiempo, una oficial que presta servicio en la Unidad Operativa de Chimen Aike, se presentó en el domicilio, que la mujer, suboficial que también presta servicios en la misma, fue quien comenzó a mediar con ella para que saliera con los chicos, que hasta ese momento habían presenciado todo y se encontraban asustados.

La suboficial no cesaba con su accionar, por lo que se solicitó la presencia del negociador de la División Fuerzas Especiales, que junto a su personal se hizo presente en el domicilio.

El negociador comenzó a dialogar con la mujer, pero su pareja no permitía el diálogo, entorpeciendo el trabajo policial. En un determinado momento de la negociación, el policía a cargo de la misma, logró sacar a una nena de unos 9 años, quien fue llevada a un vehículo de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, quienes la contuvieron. Horas más tarde la suboficial salió de la casa con el nene en brazos y no quería darle al pequeño de 5 años, hasta que la convencieron y la subieron al patrullero.