Roban mercadería de una verdulería

En la mañana de este martes, en las redes sociales del local comercial "El Gringo", ubicado en calle Zapiola al 1000, se pudo leer: "No es mucho lo que se llevaron, pero gente como esta tenemos que aguantar".

"Vienen alcoholizados a pedir todos los días, si andan de pasada, con el cuento de que juntan plata para los pescadores y, ahora, para un merendero porque Milei le sacó el subsidio. No podés decirle que no al señor, porque se enoja".

"Nosotros somos una verdulería que tratamos de ayudar siempre a cada persona que pasa por acá pidiendo, pero a este hombre se le dejó de dar porque ya era un abuso. Pasa mucha gente en situación de calle y no roban ni para comer, prefieren pedir".

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"Da bronca la actitud de esta gente, que tampoco se pone a pensar que estamos trabajando, y un NO es porque tampoco estamos en situación para regalar lo que ellos te piden, que no es para un guisito. Te piden una bolsa de papa y una de cebolla (que a nosotros tampoco nos regalan). Y tenés que colaborar porque, según dicen, es para el barrio”, finaliza el posteo en redes sociales.

Por este motivo, el móvil de TiempoSur se acercó al local comercial y dialogó con Valeria, quien relató: "Ayer esta persona vino acompañado de una mujer, creo que es su pareja, y vino a pedir para un merendero inexistente. Pero ya vienen pidiendo hace mucho tiempo”. Y continúo: "Uno le dice que 'no se puede', porque te piden una bolsa de papa y otra de cebolla. Es más de lo uno les puede dar y no se conforman, se enojan y te roban".

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Más adelante, la joven explicó: "Este señor no nos había robado hasta ayer (por el lunes), cuando vino con la señora”, y añadió: "Nosotros les damos siempre pero más por ayudar. A todos los que vienen, ayudamos, pero ya cansa". 

"Este señor vino una vez y ya, después, venía todos los días y no somos la única verdulería. En la zona hay alrededor de 10, no sé si en otro lado le dan o le daban, o si es por sacarle a los demás”.

En cuanto a lo que el sujeto le sustrajo, especificó que se llevó como cinco paltas, uvas y hasta frutillas.

Ante la consulta sobre qué querían a partir de ahora, la mujer contó que pensó en sacarle una foto y "ponerla en la puerta como hacen en otros locales, para que les de vergüenza, por lo menos. Pero eso lo veremos en estos días", concluyó.