Argentina pidió ser "socio global" de la OTAN
El ministro de Defensa viajó a la sede de Bruselas y presentó un pedido para sumar al país a la alianza militar de Occidente. Los pasos a seguir y las consecuencias.
El ministro argentino de Defensa, Luis Petri, mantuvo este jueves una reunión con el subsecretario general de la OTAN, informó la alianza militar, en el marco del interés de Argentina en alcanzar el estatus de "socio global".
Petri se reunió con el Subsecretario General de la alianza transatlántica, el rumano Mircea Geoana, y tenía previsto también un diálogo con el secretario General Adjunto para Asuntos Políticos de la OTAN, el español Javier Colomina.
En la actualidad, la alianza militar transatlántica cuenta con un selecto grupo de nueve países considerados socios globales. Entre las naciones latinoamericanas, solamente Colombia alcanzó esa condición, en 2018.
La aproximación de Argentina a la OTAN es expresión de la nueva orientación que el gobierno del ultraliberal Javier Milei busca imprimir a las relaciones exteriores del país.
Me reuní con @Mircea_Geoana, Secretario General Adjunto de la @NATO. Le presenté la carta de intención que expresa la solicitud de Argentina en convertirse en un socio global de esta organización. Seguiremos trabajando en recuperar vínculos que permitan modernizar y capacitar a… pic.twitter.com/PN0s5bx9U2
— Luis Petri (@luispetri) April 18, 2024
El martes, Petri estuvo en Dinamarca donde formalizó a nombre de Argentina la compra, por unos 300 millones de dólares, de 24 aviones de combate F-16, de fabricación estadounidense.
Esos aviones deberán substituir a una flotilla de aviones franceses Mirage, que la Fuerza Aérea argentina retiró de operaciones en 2017 luego de cuatro décadas de servicio.
Dinamarca, en tanto, está modernizando su flota aérea con cazas F-35, un modelo mucho más moderno que los F-16, aeronaves que comenzaron a ser producidas en 1974, hace cinco décadas.
Los dos países no informaron una fecha para la entrega, que incluye motores, piezas de repuesto, simuladores y equipos de entrenamiento, pero se espera que ocurra en los próximos años.
La compra de los cazas ocurre en el marco de un drástico ajuste fiscal por parte del gobierno argentino que comprende, entre otras medidas, recortes de gastos y la licuación de salarios, pensiones y asignaciones presupuestarias.
La operación sellada en Dinamarca obtuvo el acuerdo de Estados Unidos, donde los F-16 fueron construidos.