Se normaliza la rutina

A partir de este 1º de septiembre los alumnos de todos los niveles retornarán a sus salones de clase luego que el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, confirmara –con previa aprobación del Consejo Federal de Educación- que la Argentina está en condiciones de volver a la presencialidad plena. 

La situación epidemiológica del país permitió que las burbujas se amplíen bajo un esquema con protocolos que incluye una distancia de 0,90 metros en las aulas, la utilización obligatoria de barbijos, ventilación cruzada y otras medidas de cuidado. Además, podrá establecerse una distancia mínima entre alumnos de 0,50 metros en aquellas escuelas en las que resulte imposible aplicar el rango de 0,90 metros para sostener la asistencia total de los estudiantes. Y se aclaró que, en esos casos de aulas poco espaciosas, las escuelas deberán aplicar medidas preventivas adicionales, como los testeos a los estudiantes y el uso de medidores de dióxido de carbono, entre otras.

En este marco cada una de las jurisdicciones del país va a poder determinar la progresividad de las medidas aprobadas por el Consejo Federal de Educación. Teniendo en cuenta esto en la Provincia de Santa Cruz se está trabajando para que de forma progresiva se vaya ampliando la modalidad presencial. Por el momento continuarán las clases combinadas y alternadas. Pero en este periodo de transición, que implica una inminente vuelta a las aulas, representa un nuevo reordenamiento familiar, teniendo en cuenta que se establecerán nuevos horarios y cambios de rutinas.

Sumado a esto, los trabajadores de la Administración Pública también esta semana que inicia tendrán una vuelta progresiva, pero a sus puestos laborales. Sucede que a través del Decreto N°989/21, el Gobierno de Santa Cruz establece la prestación de servicios mediante la modalidad presencial gradual, a partir del 1º de septiembre de todos los trabajadores y/o trabajadoras encuadrados en los distintos regímenes legales vigentes de la Administración Pública Provincial, Entes Autárquicos y/o Descentralizados, Empresas y Sociedades del Estado y personal docente y auxiliares de la educación dependientes del Consejo Provincial de Educación.

La salvedad que indica el decreto es que mientras se mantenga el sistema de retorno gradual a la presencialidad del sistema educativo en el ámbito de la Provincia de Santa Cruz, el trabajador y trabajadora que preste funciones en el ámbito de los organismos y dependencias públicas precedentemente aludidas, y cuya presencia en el hogar resulte indispensable para el cuidado de niños, niñas y adolescentes hasta los 12 años de edad inclusive, podrá justificar la inasistencia laboral en las áreas de personal correspondientes, informando a esos fines los datos indispensables para que la autoridad de aplicación efectúe el contralor pertinente. Podrá acogerse a este beneficio un solo progenitor o persona responsable por hogar.

En caso de que la jornada escolar sea bajo la modalidad presencial no procederá este beneficio.

La nueva normalidad, otra vez

Cuando en marzo de 2020 se anunció la cuarentena por el Coronavirus la vida de los argentinos se vio atravesada en todos los aspectos, y uno de los mayores retos se debió hacer frente fue el educativo.  El cierre de las escuelas y su paso a la virtualidad para garantizar la continuidad de los aprendizajes de las y los estudiantes significó una transformación radical del clásico modelo presencial para pasar a ser virtual. Luego, con el correr de los meses, y ya con un año de cuarentena caminada llegó una nueva manera, que fue la bimodal, es decir, la combinación de la educación presencial con la virtual.

Los especialistas afirman que si bien todas las escuelas deben seguir las normativas y los lineamientos oficiales para la reapertura de sus actividades, también es necesario que cada institución diseñe los mecanismos de implementación y seguimiento de estos lineamientos. Esto implica poner en juego el conocimiento que el equipo directivo tiene acerca de los recursos humanos y materiales de su institución, los procesos que deben diseñarse, así como las estrategias de acompañamiento, capacitación y contención que resulten necesarias. En otras palabras, para que la normativa sea efectivamente una herramienta de cuidado y seguridad, el equipo de conducción debe apropiarse de esta y contextualizarla en el marco de la cultura institucional que gestiona. Una cuestión importante para considerar en este ejercicio de anticipación es la eventual necesidad de una suspensión o cierre de los encuentros presenciales en caso de contagios o un rebrote de la pandemia. También para este escenario poder anticipar comunicaciones y modos de trabajo que contengan y desplieguen nuevamente los mecanismos de continuidad pedagógica. En otras palabras, adelantarse respecto de todo lo que esté al alcance permitirá generar mejores condiciones de bienestar, contención y actuación cuando nos reencontremos en la escuela.

Además, otro gran desafío con el que se enfrentan las instituciones educativas en el contexto del reencuentro es anticipar las situaciones de estudiantes y familias que no han estado conectados con la actividad escolar a distancia y tender puentes con ellos para poder acercarlos al aula presencial. Por otra parte, y ya en los encuentros presenciales, deben acompañar a las y los docentes a prestar especial atención a las manifestaciones de malestar, vulnerabilidad o dificultad excepcional que estén atravesando algunos de los miembros de nuestra comunidad educativa para atenderlas de manera singular. Todo lo que pueda anticipar en este plano redundará en una mejor estrategia de contención y apoyo cuando se regrese a las aulas.

Los retos

Santa Cruz arrancó el inicio del Ciclo Lectivo 2021 con normalidad, salvo que adaptado al formato virtual. Con el correr de los meses muchas localidades comenzaron tímidamente a ver a los alumnos retornar a sus salones de clase. No fue hasta después de las vacaciones de invierno que ciudades más populosas como Río Gallegos y Caleta Olivia volvieron a la presencialidad.

Esto fue un primer gran acercamiento a la normalidad, momento en que se vio a muchos alumnos entusiasmados por salir de su casa para volver a reencontrarse con sus pares y docentes que no veían hace más de un año. Pero además estaban aquellos que estaban acostumbrados a que el living de su hogar sea su salón y a estos les costó un poco más retomar los viejos hábitos escolares.

La mayoría de los chicos y chicas tienden a adaptarse con facilidad a los cambios y gracias a esa capacidad el proceso de reintegración se da más fácil. En este punto es fundamental el acompañamiento de padres y docentes para que la nueva normalidad no sea con sobresaltos. Hay que tener en cuenta que el cuidado de la higiene y el mantener distancia son ahora complementos que los acompañarán a la escuela.

Por el lado de los padres, este retorno que por el momento en Santa Cruz no será pleno, generará ansiedad y un desorden en la vida diaria, ya que se deberán incorporar nuevos horarios y ajustarlos a la vida laboral.

La prolongación y masificación de la vuelta plena a clases presenciales dependerán del cumplimiento de las medidas y protocolos sanitarios, como también del avance de la inmunización de la población que se traduzca en bajos valores de casos positivos de Coronavirus.