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"Nos subimos a la antena porque era esto o volver a casa sin trabajo"

Las mujeres de la cooperativa de Pico Truncado salieron sanas y salvas de su reclamo. Logran una solución tras la protesta subidas en una antena. Alexandra, Laura, Marianela y Janet dieron sus por qué de esta acción.

  • 05/11/2024 • 14:23

Cuatro mujeres provenientes de Pico Truncado, exmiembros de la cooperativa de trabajo, llegaron a la ciudad de Río Gallegos con la intención de solicitar una solución a su crítica situación laboral. Ante la falta de respuestas y tras varios intentos infructuosos, decidieron llevar su reclamo a un nivel extremo: se subieron a una antena en un acto de protesta que llamó la atención de la comunidad y las fuerzas de seguridad.

La decisión fue tomada luego de meses de incertidumbre y sin trabajo formal. En una entrevista con TiempoSur, una de las manifestantes, Laura, explicó que la cooperativa a la que pertenecían ya no les ofrecía trabajo y no recibieron ninguna respuesta del municipio de Pico Truncado. "Vinimos a pedir una solución pacífica, pero no tuvimos respuesta. Nos subimos a la antena porque era esto o volver a casa sin trabajo", afirmó Alexandra.

Tras varias horas en la cima de la antena, el funcionario provincial de la cartera laboral, Javier Aravena, se acercó a las manifestantes y les ofreció puestos de trabajo como parte de la solución. “Nos dio una respuesta favorable, hasta el 31 de diciembre, con la promesa de conseguir un nuevo empleo luego de ese plazo", comentó Marianela, otra de las mujeres involucradas en la protesta.

El compromiso fue claro: las cuatro mujeres tendrían trabajo y una solución a su situación laboral. De acuerdo con su relato, también se comprometieron a cubrir los gastos de los pasajes para su regreso a Pico Truncado. 

A pesar del riesgo que implicaba su acción, las mujeres insistieron en que no hubo otra opción para ser escuchadas. "Sabíamos que era peligroso, pero ya no podíamos quedarnos con los brazos cruzados", sostuvo Janeth.

El acto de protesta culminó de forma exitosa sin incidentes. Las cuatro mujeres lograron que su voz fuera escuchada y regresan a su ciudad con trabajo asegurado, al menos por los próximos dos meses. "Volvemos con la tranquilidad de que tenemos trabajo, algo que parecía perdido", concluyó Laura, visiblemente aliviada.