"Las temperaturas extremas generan estrés cardiovascular"

El verano y las altas temperaturas pueden ser un desafío para la salud, especialmente para nuestro corazón. Las olas de calor, cada vez más frecuentes e intensas debido al cambio climático, generan un estrés adicional en el sistema cardiovascular, aumentando el riesgo de complicaciones, especialmente en personas mayores, con hipertensión, diabetes o enfermedades cardíacas preexistentes. Como afirma el Dr. Pablo Rodríguez, vicepresidente de la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial y jefe del servicio de hipertensión arterial del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires, "las temperaturas extremas generan estrés cardiovascular".

¿Por qué el calor estresa al corazón?
"Desde el punto de vista cardiovascular, las temperaturas extremas generan estrés y esto puede traer complicaciones a algunos cuadros", explica el Dr. Rodríguez. "Con el calor, la presión tiende a bajar de forma significativa y por eso hay gente medicada que suele tener que cambiar la dosis de medicación para estar en valores óptimos". Añade que esta decisión "no puede tomarse de forma arbitraria, sino que siempre tiene que ser bajo consulta médica". El descenso de la presión arterial, sobre todo en pacientes añosos, puede ser tan pronunciada que, según el Dr. Rodríguez, "pueden asociarse a cuadros de desmayos". Por ello, insiste en que "es importante mantener una hidratación muy adecuada en pacientes ancianos porque hace que la presión no baje tanto ni de forma abrupta". Más allá del calor, el Dr. Rodríguez recomienda "sostener la actividad física porque es fundamental para cuidar la salud cardiovascular", adaptándola a las condiciones climáticas.
"Cuidar la exposición en las horas de más calor, hidratarse antes y después de la actividad" aconseja. Y concluye: "La temporada de calor cada vez se extiende más y el aparato cardiovascular no se toma vacaciones. Cuidarlo es una tarea de todo el año".

Consejos para cuidar tu corazón en verano:

• Hidratación constante: Bebe al menos dos litros de agua al día. Evitá bebidas azucaradas y carbonatadas.
• Actividad física inteligente: Mantenerse activo es fundamental para la salud cardiovascular, incluso en verano. Adaptá tu rutina a las temperaturas, evitando las horas de mayor calor (entre las 12 y las 16 hs). Hidrátate antes, durante y después del ejercicio.
• Ajustes en la medicación: Si tomas medicación para la presión arterial, consulta con tu médico. El calor puede requerir ajustes en la dosis. Nunca modifiques tu medicación por tu cuenta.
• Evitá cambios bruscos de temperatura: Procurá mantener una temperatura corporal estable, evitando pasar de ambientes muy fríos a otros con calor extremo. Permanece en espacios bien ventilados o con aire acondicionado moderado.
• Dieta saludable: Optá por comidas ligeras y frescas, ricas en frutas y verduras. Evita comidas copiosas, grasas, saladas y azucaradas, así como el alcohol y la cafeína.
• Vestimenta adecuada: Usá ropa ligera y transpirable, preferiblemente de colores claros. No olvides usar gorra o sombrero.
• Respeta las horas de mayor calor: Evitá la exposición al sol entre las 12 y las 16 hs.

En Argentina, las enfermedades cardiovasculares son la causa de una de cada cuatro muertes, lo que significa que el 25% de los fallecimientos se deben a estas enfermedades. Sin embargo, se estima que 8 de cada 10 eventos cardíacos podrían evitarse.