Mínimo aumento de casos en relación a mayo, pero con incremento de vacunados en Santa Cruz
En junio los contagios aumentaron levemente en relación a mayo, cuando hubo un incremento notorio. Pero además, la vacunación aumentó considerablemente, siendo el segundo mes del año en el cual se aplicó la mayor cantidad de dosis.
A mediados de mayo TiempoSur había dado cuenta del incremento de casos por COVID-19 que se duplicaron semana a semana, en lo que fue la interrupción de la caída de contagios en abril, con solo 70 infectados en Santa Cruz.
Esta cuarta ola, producto de la subvariante de Ómicron BA.2 también se distinguió de las anteriores por la gran cantidad de vacunados, y por ende protección –que se refuerza con los ya infectados- que no derivó en la suba de internados graves en las camas de las Unidades de Terapia Intensiva.
En junio, con 561 casos, los contagios casi se mantuvieron estables en relación a mayo (468).
Esto no significó una caída en la cantidad de fallecimientos. Lamentablemente hubo 12 decesos producto del COVID en el sexto mes del año, que superó la sumatoria de marzo, abril y mayo. Aunque la subvariante de Ómicron es mucho menos letal que sus antecesoras, la explicación se encuentra en diversas variables, según los profesionales de la salud: las patologías preexistentes; el sistema inmunológico de cada persona, o no contar con la protección suficiente con solo dos dosis de la vacuna.
“Veo pacientes que se conforman con las dos dosis, aunque algunos se preocupan con el aumento de casos y van a vacunarse, porque hay que decir que ya vamos por la cuarta dosis”, advirtió a TiempoSur en su edición del 12 de junio el Dr. Alejandro Avakian.
El médico recordó que si la vacuna que recibió una persona fue Sinopharm “necesita la tercera y cuarta dosis, ya que esta vacuna mostró una menor eficacia que las otras vacunas, y por eso hay que reforzar el esquema”.
Entonces, la eficacia de las vacunas disminuye con el correr de los meses, por lo tanto, si transcurren cuatro, cinco o seis meses “el nivel de anticuerpos no es suficiente y por eso se estimula la tercera y cuarta dosis”.
Argentina ya aplica la cuarta dosis, pero miles de santacruceños disponen solo de dos vacunas.
Sin embargo, y pese a estos datos, junio fue el mes que más vacunas se aplicaron luego de enero.
En el primer mes de este año, cuando hubo el mayor pico de contagios desde el inicio de la pandemia con más de 24 mil contagios, se aplicaron 68.667 dosis; y en junio fueron 51.846. (Ver recuadros)
El incremento de contagios ya había sido advertido por TiempoSur a mediados de mayo, cuando se detalló como las infecciones aumentaban semana a semana, aunque a una velocidad y cantidad totalmente diferente a lo que fue la tercera ola del Coronavirus que se vivió durante diciembre del año pasado y enero del año en curso.
También se había expuesto que es diferente el contexto de esta cuarta ola que transita el país y Santa Cruz, al existir más vacunados y muchas menos internaciones producto de la subvariante de Ómicron.
Cuando hay un cambio en el curso de una pandemia, también se modifican los protocolos de aislamiento y testeos.
Primero el periodo de aislamiento fueron 14 días, luego bajó a 10 y después a siete.
De acuerdo a la CDC -Centros para el Control y Prevención de Enfermedades- una persona que es testeada y da positivo, puede contagiar durante los 10 días posteriores.
Y se considera portadora de la infección dos días antes de haber dado positiva o dos días antes de tener síntomas.
Con esta subvariante, el periodo de incubación y síntomas es de solo tres días, por lo que la recomendación es el aislamiento durante cinco días si la persona está vacunada.
La persona asintomática se recomienda que también se aísle.
Los contactos estrechos de personas vacunadas no se aíslan, pero sí los que no se vacunaron contra el COVID-19.