Fruto divino del trabajo

En diciembre de 2018, en el marco del G-20, uno de los presidentes que arribó al país fue Xi Jinping, de China. Allí, comenzó a forjarse la operatoria para que se abra el mercado para las cerezas argentinas en dicho país.

El 24 de enero se realizó el primer envío. Se despacharon desde Río Negro 1.300 kilos de cerezas  en el vuelo AR1300 rumbo a New York, desde donde continuarán el tránsito hacia Shangai.

Pero las buenas noticias no solo fueron para los rionegrinos, ya que Santa Cruz también enviará este fruto. Serán 15 toneladas que fueron cosechadas en Los Antiguos por la Cooperativa El Oasis y la empresa Río Alara S.A.

NOS entrevistó a Federico Guenderain, quien es Integrante del Consejo de Administración de la cooperativa y encargado de la comercialización de la cereza. Comentó acerca de esta hito para la vida de El Oasis, cómo se preparan, los requerimientos, las expectativas y el horizonte que asoma.

El 10 de enero una delegación de funcionarios del Gobierno de China llegó para recorrer los establecimientos productivos en vistas a la exportación al país asiático. Se interiorizaron sobre el proceso que implica la producción de cerezas e hicieron una auditoria relacionada con lo documental y de trazabilidad en cuanto a la calidad de la fruta. Finalmente, se certificó que el producto es aptó para exportar.

No pueden fallar- El Oasis es una cooperativa de producción y empaque de cereza y comercialización. Agrupa a 16 pequeños productores de cereza de Los Antiguos. Los mismos, producen en un terreno que va desde 1 hasta 5-6 hectáreas. Este 2019 cumplen 30 años y casi 26 temporadas empacando el producto.

“Pasamos con mucho nervio esa semana que estuvo la delegación. No sabíamos bien qué iban a buscar, qué iban a preguntar, pero por suerte salió todo bien”, expresó Guenderain. Días después le llegó el informe a la embajada argentina y el SENASA. Estaba todo en condiciones.

Al momento de realizar la nota, junto con la empresa Río Alara S.A, preparaban todo para enviar un contenedor compartido entre ambos, con 15 mil kilos de cereza. Todo con una planificación minuciosa ya que procesan la fruta y la compactan apenas unos días antes de que parta el embarque para que la cereza sea lo más fresca posible.

En cuanto a los requerimientos, señaló que la bolsa tiene que ser sellada, no puede ser abierta. En el exterior de las mismas tienen que estar las etiquetas en inglés y chino. Además, los pallet tienen que ser tratados para no ingresar plagas en las maderas.

Puntualizando en las etiquetas, contó que les enviaron un modelo indicando lo que debe decir y acá debieron buscar en internet los signos exactos, ya que “la mínima coma errónea y no dejan entrar nada. En eso fueron muy exigentes”.

Aprovecharon cuando estuvo la delegación e imprimieron una etiqueta. “Lo vieron y había un carácter que era distinto. Nos advirtieron. Lo corregimos y nos dijeron que estaba todo okey”.

200 mil kilos de cereza- “Es histórico esto para nosotros. Pensar que hace más de 20 años, cuando empezamos, no teníamos ni siquiera clientes en Comodoro y hoy hacer el envío a China oficialmente , con todo lo que significa llegar a este país, es un logro muy importante para toda nuestra familia de la cooperativa”, manifestó el encargado.

Expuso que es muy importante para ellos llegar a este mercado porque “no tienen límites, todo nuestro producto se puede vender por lo tanto es un gran desafío”.

En cuanto a kilos, calificó como muy buena la temporada 2018/2019. “Es record en lo que refiere a kilos procesados y empacados. Va a andar cerca de los 200 mil kilos empacados. Nunca habíamos hecho tanto”, y esto lo atribuye a una primavera muy suave, que no fue tardía y no hubo heladas entonces.

La cooperativa, de lo que produce el 50% es para el mercado intertno y el otro 50% se exporta. En el país el principal mercado es Buenos Aires, la costa atlántica, Rosario y Bahia Blanca. En el exterior, medio oriente (desde 2012) es el principal destino; envían a Qatar, Arabia Saudita, Baréin, España (desde 1997) y Rusia.

Al final, hay recompensa- Por último, hablando sobre el futuro, Guenderain marcó que la idea es seguir creciendo, y resaltó el llegar a China en el marco de un año difícil para todos. De aquí en adelante, consideró que se debería hablar con el Gobierno Nacional para que el acuerdo de libre comercio reduzca a 0 el arancel de importación chino. En Chile, por ejemplo, no se abona.

Uno de los principales anhelos es “poder realizar las inversiones para seguir manteniendo la calidad y los volúmenes año a año. Mejorar la infraestructura, eso es fundamental sino vamos a dejar de crecer”, detalló.

No quedarse estancados es significante para poder instalarse en China y otros países. “Imagínate son 40 días de viaje. Si no haces las cosas bien llega mal la fruta y se arruina todo el negocio”. Es muy grande la responsabilidad. Tan grande como la recompensa que puede haber. Todo, fruto del trabajo sostenido de 30 años.