Zona norte

El regreso de la escalada en el Cañadón Caracoles

El Encuentro de Escalada en el Portal Cañadón Caracoles marcó el regreso esperado a un escenario que promete instalarse con fuerza como uno de los destinos claves para la escalada en el noroeste santacruceño.

  • 28/03/2025 • 09:44
El regreso de la escalada en el Cañadón Caracoles. Fotos: Horacio Barbieri.
El regreso de la escalada en el Cañadón Caracoles. Fotos: Horacio Barbieri.

La luna llena iluminando el paisaje nocturno de los inmensos paredones de roca fue el cierre de tres jornadas inolvidables, que celebraron la reapertura del Cañadón Caracoles con cuerdas, mosquetones y abrazos compartidos entre comunidades.

El Club Andino Pari Aike de Perito Moreno se conformó hace muchos años. “Éramos un grupo de amigos motivados por la escalada, que soñábamos con que más personas pudieran conocer este mágico lugar”, cuenta Ariel Obregón, uno de los integrantes del club. “Con la invitación del parque a retomar la actividad, nos motivamos para organizar este primer encuentro”.

La convocatoria superó todas las expectativas. Escaladores y escaladoras llegaron desde Los Antiguos, Lago Posadas, El Chaltén, Caleta Olivia, Puerto Deseado y Río Gallegos. También participaron personas de otras provincias y hasta de otros países. “El clima acompañó: con buenas temperaturas y sin viento, fueron tres días espectaculares de escalada y de compartir con los demás”, recuerda Ariel.

La reapertura del Cañadón Caracoles, impulsada por el equipo de Parque Patagonia, habilitó nuevas oportunidades para fortalecer el vínculo entre la escalada y la conservación. Durante las jornadas, guías del Club Pari Aike brindaron bautismos de escalada para todas las edades, acompañando a quienes se animaban a la roca por primera vez.

Además, hubo charlas, clases de yoga, estiramientos y un cierre inolvidable: “Compartimos un almuerzo con corderos, parrillada y opciones para quienes no comen carne, y como broche final, la luna llena iluminando el cañadón fue perfecto”, dice Ariel.

Desde el Parque Patagonia, Rocío Navarro —responsable de Comunidades— subraya la importancia de este tipo de propuestas: “Desde el parque decidimos acompañar esta actividad porque entendemos que las experiencias significativas en la naturaleza, como escalar, pueden fortalecer el vínculo con el territorio. Y ese vínculo es clave para cuidar. Este encuentro fue una oportunidad para tender puentes entre quienes aman este lugar y quienes lo cuidan desde la gestión. Ver a tanta gente en armonía disfrutando del Cañadón, nos confirma que vamos por buen camino”.

Un campamento al pie de la roca

El Portal Cañadón Caracoles cuenta hoy con infraestructura para disfrutar del turismo de naturaleza: un centro de informes para orientar a los visitantes, baños secos, provisión de agua, parcelas de acampe con mesas y un entorno que invita a quedarse. “Es un lugar mágico. Ver cómo se reflejan los rayos del sol en los paredones, la vegetación, los animales… es una experiencia única. Y para los escaladores, tener la zona de campamento a unos metros de las vías es un lujo”, destaca Ariel.

La integración de la escalada al Parque Patagonia es una apuesta por ampliar las posibilidades del turismo de naturaleza, con una mirada sustentable. “Con esta propuesta se abarca otro sector de visitantes, gente que viene específicamente a escalar. Y la comunidad escaladora es muy respetuosa del entorno, su estilo de vida está vinculado con el cuidado y la preservación del ambiente”, agrega.

Una guía para llegar más alto

Una de las herramientas clave para fomentar la actividad fue la creación de una guía de escalada —o “los topos”, como se conocen en la jerga—. Este material ofrece información técnica de cada vía: nombre, dificultad, ubicación y equipo necesario.

“La primera guía digital fue realizada por Santiago Scavolini, un guía de escalada que dejó ese gran aporte. Para la actualización de la guía, Juan Carlos Sepúlveda y Maximiliano Castillo, integrantes del club y creadores de muchas de las vías, sumaron información y desde el parque lo complementaron con otros datos de importancia”, cuenta Ariel.

Rocío Navarro suma una mirada que une deporte y conservación: “Queríamos que la guía fuera más que un mapa de rutas: que ayude a quienes escalan a comprender el valor ambiental del lugar donde están. La escalada puede ser una gran aliada de la conservación. Sabemos que quienes practican este deporte ya tienen una conexión fuerte con la naturaleza, así que nuestra intención es sumar información que potencie ese vínculo y los invite a formar parte activa de la restauración del humedal. Que juntos podamos reparar, colaborar en el proceso de recuperación de un ecosistema que estuvo muy afectado. Que cada visita deje algo más que huellas en la roca, sino también una acción concreta: como sembrar un junco, cuidar una vertiente o simplemente hablar con otros sobre lo valioso que es este lugar”.

La guía de escalada está disponible en formato digital en la web de Parque Patagonia Argentina. Su existencia es una muestra más del trabajo articulado entre escaladores, comunidad y áreas protegidas.